Paro masivo entre los funcionarios de prisiones por la fuga de Huesca

La mayoría de los funcionarios de las 84 prisiones dependientes del Ministerio de Justicia pararon ayer durante dos horas para protestar por la inseguridad en los centros penitenciarios y por la fuga de dos peligrosos reclusos de la cárcel de Huesca, ocurrida el pasado viernes, según fuentes de CC OO, CSIF y UGT. Según este último sindicato, el índice de participación en esta protesta "ha sido altísimo". Cuatro internos del centro de Huesca han sido conducidos a otras prisiones y puede haber más traslados en breve.

Los sindicatos aseguraron que el seguimiento del paro fue generalizado en la mayor parte de los centros, con porcentajes de participación que oscilan entre el 85% y el 95% de los trabajadores. Los únicos recintos que no secundaron la convocatoria fueron los de Herrera de la Mancha (Ciudad Real), Valladolid y Logroño, mientras que en Palencia, Salamanca, Ciudad Real y Castellón la incidencia fue escasa.Las fuentes informantes indicaron que durante el tiempo que duró la protesta no se produjeron incidentes y que la situación fue de "normalidad absoluta" en todos los centros, incluyendo aquellos en los que la huelga fue secundada por la totalidad de la plantilla. Pese a eso, los trabajadores permanecieron en su puesto y atendieron a las "necesidades mínimas".

El secretario general de la Agrupación de Servicios Penitenciarios de Comisiones Obreras de Cataluña, Josep María Balasch, calificó de "precipitada" la actuación del director de la prisión de Huesca, de donde dos reclusos considerados como muy peligrosos -Manuel Castillo y Carlos Manuel Estévez- se fugaron el pasado viernes, informa Europa Press.

"Mal precedente"

Balasch, en coincidencia con lo manifestado por el secretario general de Asuntos Penitenciarios, Antoni Asunción, comentó que la evasión de ambos reclusos ha creado un "mal precedente", al permitirse la escapada de los presos en el automóvil del propio director del establecimiento.

El secretario general de la Agrupación de Servicios Penitenciarios de CC OO añadió que, pese a la difícil situación que se creó en la prisión de Huesca, el director del centro y de las Fuerzas de Seguridad del Estado actuaron "precipitadamente" y de forma "muy descoordinada".

Josep María Balasch añadió que los dos presos fugados no tenían un plan prestablecido y si lograron llegar a Barcelona fue porque tanto el director del establecimiento como la policía y la Guardia Civil no actuaron de forma adecuada.

A raíz de la fuga de Huesca, los sindicatos han solicitado una entrevista con el secretario general de Asuntos Penitenciarios, Antoni Asunción, para debatir con él las medidas de tratamiento que se pueden aplicar a los reclusos más peligrosos. Estos han protagonizado diversos motines, secuestros e incidentes en las cárceles durante este año.

"La reunión con Asunción", según señalaban el pasado lunes los diversos sindicatos, "debe producirse en el transcurso de esta semana. Si no, se endurecerán las medidas de presión incrementando las horas de paro progresivamente, sin descartar el paro general".

Prosigue en Barcelona y sus alrededores la búsqueda de los dos evadidos, sin que hasta el momento haya ninguna pista sobre su paradero.

Evasión en Córdoba

Mientras, un recluso se evadió el viernes de la cárcel de Córdoba aprovechando una visita que realizaba junto a otros 19 internos al cementerio nuclear de El Cabril, informa José L. Rodríguez. Esteban Rueda Rodríguez, de 31 años, abandonó la expedición en compañía del preso José Carretero Cruz. Este último regresó a la prisión más tarde con síntomas de haber sido golpeado.

Rueda, condenado a más de 20 años de prisión por múltiples robos y que dentro de tres años habría obtenido la libertad condicional, tuvo que haber planeado la fuga, pues puso gran interés en acudir a la visita de El Cabril, cuando la dirección no había contado con que este recluso tormara parte de la expedición que viajó hasta el centro de almacenamiento de residuos radiactivos, situado a unos 100 kilómetros de Córdoba.

El fugado estaba incluido en otro grupo que iba a visitar el sábado 30 de noviembre el recinto de la Expo en Sevilla. Sin embargo, Esteban Rueda solicitó el cambio de excursión y la dirección del centro accedió.

Ésta es la segunda ocasión en que internos de la prisión de Córdoba huyen del centro penitenciario aprovechando una visita programada. El 29 de agosto, el recluso Fernando Molina Durán, de 28 años, huyó durante una visita al Museo Taurino de esa ciudad, aunque regresó al penal por propia voluntad a las 18 horas de la fuga.

En Barcelona, funcionarios de la prisión de jóvenes de la Trinitat frustraron a las 21.15 horas un intento de fuga de tres reclusos que se encaramaron al tejado del recinto.