_
_
_
_

François y yo...

El canciller alemán, Helmut Kohl, un campechano hombretón del Palatinado, se honra de tutear a los jefes de Estado y de Gobierno con los que tiene relación. A Gorbachov le llama Michael; a González, Felipe; a Major, John, y a Bush, George, pese a que, en alemán, el familiar du (tú, en español) se reserva sólo para las amistades más íntimas.Pero de todos es sabido que, hasta la fecha, su ya larga relación de casi 10 años con el presidente francés, FranQois Mitterrand, se había mantenido en el estricto campo del usted, y que jamás se había referido a él por su nombre de pila.

Hasta la fecha, porque ayer, ante la sorpresa de todos los presentes, Helmut Kohl quiso demostrar que, finalmente, había roto el protocolo y conseguido tutear a François Mitterrand.

En no menos de tres ocasiones, durante la conferencia de prensa, se refirió a las conversaciones mantenidas con el mandatario francés con la expresión: "François y yo hablamos ayer...", o "François y yo estamos de acuerdo...".

El presidente Mitterrand, por su parte, no pestañeó.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_