Silencios informativos

Una vez más hemos asistido a la ceremonia de la confusión y la desinformación. El pasado domingo 27 de octubre se celebró una manifestación, convocada, entre otras fuerzas, por el sindicato Solidaridad Obrera, con la que unas 2.000 personas expresábamos nuestro rechazo a la nueva Ley de Seguridad Ciudadana que está tramitando el partido en el poder.Pues bien, escasos medios de comunicación se han hecho eco de este acontecimiento. Es sintomático que el grado de atención al mismo variaba según el grado de implicación o convergencia con la política gubernamental de cada medio en concreto, y fue penoso constatar que la mayoría de los mismos silenciaba ominosamente esta noticia.

Desgraciadamente, la línea informativa actual degrada cada vez más una profesión otrora bien considerada socialmente, subordinándola a los poderes constituidos y burocratizándola hasta extremos insospechados. Hoy nada vale, informativamente hablando, la voz de unos cientos o unos miles de ciudadanos frente al político de turno o la descarada diatriba de algún prócer a base de talonario.

De igual manera parece contar poco la opinión de esos ciudadanos amenazados por una ley que se autorreclama de su seguridad frente a las componendas, pactos y chanchullos de aquellos que, en definitiva, están de acuerdo en dejarla pasar.

Poco más nos queda que apoyarnos en esos contados profesionales que, haciendo gala de verdadera independencia, se niegan a colaborar con esa directriz de "muera la imaginación" que desde el poder se intenta insuflamos a todos.

secretario de prensa de Solidaridad Obrera.