Leguina intuye una conspiración entre Guerra y dirigentes madrileños

"Quizá fuera una conspiración, es probable que lo sea por reducción matemática al absurdo. ¿Qué otra cosa pudo ser?" Así definió ayer el presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, la reunión, hace una semana, de socialistas madrileños con el vicesecretario general del PSOE, Alfonso Guerra.Para Joaquín Leguina, que aprovechó un acto oficial para pronunciarse por primera vez en público sobre las últimas disputas en la Federación Socialista Madrileña (FSM), la reunión en la que participó el ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra no fue "orgánica", porque no estaba el secretario general, Teófilo Serrano, y tampoco fue "institucional", ya que faltaban alcaldes y representantes del Gobierno regional.

El presidente madrileño aseguró que tiene "constancia fehaciente" de lo tratado en otra reunión de Guerra con destacados militantes de la FSM, al referirse a la tertulia convocada el pasado mes de octubre por el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Juan Barranco.

"Algunos amigos personales míos han tenido a bien contarme [su contenido] con pelos y señales, pero no lo voy a reproducir; a está todo reproducido y poco puedo añadir a lo publicado", dijo Leguina. "Y aunque los periodistas puedan tener malévolas intenciones no suelen inventarse las cosas", agregó.

Inmensa mayoría

Leguina descarta que las disensiones en el PSOE madrileño puedan acabar en un congreso extraordinario. En su opinión, el secretario general de la FSM cuenta con la inmensa mayoría de los apoyos y no está muy lejos del 100% de los votos logrados en el último congreso regional de hace nueve meses.

Los reavivados enfrentamientos en la FSM -cuyo presidente José Acosta, fue animado por Guerra a dar la batalla al ex guerrista Teófilo Serrano y a criticar el pacto con IU en la Comunidad de Madrid- van a afectar al interior partido, según Leguina. Sin embargo, el presidente madrileño considera que a la sociedad no le interesan los "dimes y diretes" del PSOE.

"Parece que mientras unos estamos con voluntad de resolver los problemas [de la sociedad] otros han decidido crearlos", apuntó Leguina en una clara alusión a las desestabilizaciones provocadas por el sector acostista de la FSM.

"Algunas personas -no sé si es genético o adquirido- tienen una componente conspiratoria permanente, pero por suerte son una pequeña minoría", agregó. "Me da la impresión de que esto son ganas de montar tormentas en vasos de agua y los vasos de agua lo mejor que puede hacer uno es bebérselos".