Interior impide aparcar alrededor de 67 edificios

El Ministerio del Interior mantiene en un nivel de máxima protección 67 edificios del centro de la ciudad, tanto sedes de organismos oficiales como hoteles donde residen las delegaciones de la Conferencia de Madrid. Esta seguridad se concreta, sobre todo, en limitaciones para aparcar. Estas restricciones se suman a las decretadas para 11 calles situadas cerca del Palacio de Oriente. Ayer, pese a todo, la intensidad del tráfico disminuyó.

El concejal de Circulación del Ayuntamiento de Madrid, José Antonio García Alarilla, no ha tomado ninguna medida para mejorar el tráfico en la ciudad mientras dure la Conferencia de Madrid. Nadie se lo ha pedido. No ha recibido ninguna notificación oficial reclamándole alguna actuación concreta, y, por tanto, los agentes se limitan por ahora a facilitar el tránsito de los coches de las distintas delegaciones a su paso por el casco urbano. La Policía Municipal sí ha decidido, a sugerencia del Gobierno, cortar el paso en una calle (el paseo Ciudad de Plasencia entre la calle de la Virgen del Puerto y la de Bailén) y prohibir el aparcamiento en otras 10 alrededor del Palacio de Oriente (además de la propia plaza de Oriente, calle de San Quintín, Lepanto, Requena, plaza de Isabel II, Carlos III, Felipe V, Arenal, Mayor y Bailén). Estas limitaciones y otras medidas de seguridad se extienden a 67 edificios céntricos, sedes de organismos oficiales y hoteles donde residen los componentes de las distintas delegaciones, que están siendo vigilados por policías nacionales.

La mayor parte de los miembros de estas delegaciones ocupan habitaciones en los 13 hoteles de lujo de la capital (cinco estrellas) o en alguno de los 34 de cuatro estrellas.

Ningún departamento oficial (Ayuntamiento, Policía Municipal, Ministerio del Portavoz del Gobierno, Ministerio del Interior, Oficina de Información Diplomática, Secretariado Español organizador de la conferencia) pudo precisar ayer, sin embargo, cuántos hoteles ocupan las siete delegaciones participantes, los dos países convocantes y los dos que actúan de observadores.

Mejoró el tráfico

La situación del tráfico en la ciudad, especialmente en la zona centro que se conoce como la almendra, mejoró ayer. La intensidad de vehículos se redujo, con respecto a un martes normal, entre un 4% y un 7% en distintas franjas horarias. El día anterior, cuando empezaron a llegar,los representantes de algunos países, el descenso medio se había situado en torno al 5%. El bombardeo informativo previo sobre las posibles repercusiones de la conferencia en las calles, tanto por las restricciones que se iban a aplicar como por las limitaciones en los aparcamientos, condicionó a muchos de los conductores habituales a guardar el coche.El gabinete de control del tráfico del Ayuntamiento confirmó que no se habían adoptado, ni durante los días pasados ni para poner en práctica desde hoy que comienza la conferencia, medidas especiales. Los responsables municipales están, en este sentido, algo desorientados ante la falta de directrices claras desde el Gobierno.

El alcalde, José María Álvarez del Manzano, visitó ayer personalmente, acompañado del concejal de seguridad, Carlos López Collado, los itinerarios que realizan algunas de las comitivas de la conferencia a su paso por Madrid y afirmó que a las dos de la tarde la situación era "absolutamente normal", informa Efe. Álvarez del Manzano indicó que los únicos problemas se habían observado en el acceso a la ciudad por la carretera de Barcelona desde el aeropuerto de Barajas, en donde se han habilitado dos carriles exclusivos.

El Ayuntamiento de Madrid, que ha comenzado a evaluar el coste de los servicios que está prestando a la organización de la Conferencia de Paz, calcula que sólo durante los cuatro primeros días de esta semana (entre el 28 y el 31) los agentes de las Policía Municipal están acumulando horas extras por valor de 32.083.000 pesetas, informa Juan Antonio Carbajo.

La Policía Municipal ha desplegado un millar de agentes para cubrir los 23 recorridos distintos programados para las delegaciones. El Ayuntamiento quiere evaluar su contribución a la conferencia para avalar su reivindicación de la Ley de Capitalidad. El equipo de gobierno quiere que una ley compense ecónomicamente a la ciudad de sus gastos como capital.