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AUTOMOVILISMO

El duelo entre Sainz y Kankkunen presidirá el Rally de Australia

El Rally de Australia, décima prueba puntuable para el Mundial de la especialidad, comienza hoy en Perth con la disputa de una superespecial de sólo dos kilómetros. La prueba se presenta como decisiva para el desenlace de¡ campeonato. A falta de cinco rallies para el final de temporada, el español Carlos Sainz (Toyota Celica) afronta la competición como líder de la clasificación de pilotos con una ventaja de 22 puntos sobre el finlandés Juha Kankkunen (Lancia Delta).

Sainz se ha visto beneficiado por la decisión de la federación internacional de automovilismo (FISA) de descalificar al finlandés Timo Salonen (Mitsubishi), tercero en el pasado Rally de los 1.000 Lagos, por utilizar carburante no homologado. En el campeonato de marcas, Lancia supera a Toyota por dos puntos y las dos escuderías mantienen posibilidades de éxito. La que gane dos de las tres pruebas que faltan para el campeonato de constructores logrará el título.Los favoritos en Australia vuelven a ser los de siempre: Sainz y los pilotos de Lancia, el francés Auriol y el finlandés Kankkunen. Sólo los representantes de Mitsubishi pueden hacer variar este pronóstico. Sainz participa por segunda vez en este rally, después de que el año pasado acabara segundo detrás de Kankkunen, vencedor en las dos últimas ediciones.ç

Sainz, actual campeón del mundo, es consciente de la importancia del Rally de Australia: "Nuestra ventaja en el Mundial es inferior a la de 1990 y el resultado de Finlandia fue un golpe duro a nuestras aspiraciones. El campeonato no se decidirá hasta el final y cada punto será muy valioso". El piloto español vuelve a ser la única baza de Toyota, aunque la marca japonesa se ha reforzado con el piloto local Neil Bates. Precisamente, uno de los rivales de Sainz en Australia será Markku Alen (Subaru), recién fichado por Toyota para la temporada 1992.

Las características del Rally de Australia son muy particulares. La prueba discurre por pistas de tierra recubiertas por una capa de pequeñas piedras que dificultan la adherencia de los vehículos. Además, las intensas lluvias de las últimas semanas han convertido muchos tramos en auténticos barrizales.

La actividad competitiva de la primera jornada se reduce a una prueba superespecial de dos kilómetros. En Australia, ésta será una de las pocas ocasiones en que los escasos aficionados de aquel país puedan presenciar un tramo en directo puesto que casi todas las especiales se disputan en zonas de acceso prohibido al público.

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