Los vendedores de la plaza de Castilla son presionados para abandonar su actividad

El Ayuntamiento, a través del concejal-presidente de la Junta de Chamartín, Miguel Cantos, pretende que los 25 vendedores ambulantes que hasta este verano montaban sus puestos en la plaza de Castilla abandonen definitivamente su actividad. Estos vendedores se concentraron ayer en la Junta de Chamartín para exigirle "que cumpla la promesa de concedernos casetas en la zona". Pero las últirrias propuestas ofrecidas por Cantos a estos comerciantes son blen distintas: "que realicen su actividad en mercados y galerías comerciales o que dejen que les reciclemos a sectores profesionales con futuro, como el taxi, la hostelería o la construcción".Los 25 vendedores, dedicados desde hace 15 años al comercio de bisutería, ropa, chucherías y frutos secos, recibieron una orden de desalojo el pasado 17 de agosto. Según su versión, Cantos había prometido estudiar emplazamientos alternativos para los puestos. "Pero el jueves, en una reunión para definir aspectos técnicos, nos dijo, para nuestra sorpresa, que la venta ambulante está prohibida en Madrid y que nos ofrecía cursos de formación en la industria del taxi y en la hostelería", aseguran.

Miguel Cantos apela a lo que considera una regla de oro del equipo de gobierno municipal: "Seguridad, decoro y libre circulación en las calles". El concejal-presidente de Chamartín reitera que su grupo político quiere eliminar la venta ambulante, salvo en los mercadillos recogidos en las ordenanzas municipales, que no se ampliarán. "Pretendemos que Madrid no sea el paraíso donde todo cabe", expone, aludiendo de nuevo a una máxima del equipo de gobierno.

"Lo que pedimos es que nos concedan casetas, como se hizo en Goya. Nosotros ya pagaremos lo que haya que pagar y limpiaremos lo necesario, pero no aceptamos que nos echen así, sin más ni más", explican los vendedores. "De 1981 a 1989, el Ayuntamiento nos concedió licencias a todos, pero a partir de abril de 1990, el nuevo equipo de gobierno dejó de cobrarnos las tarifas municipales, y ahora nos acusa de estar ilegales", añaden. Estos vendedores han reiterado que el lunes volverán a montar sus tenderetes, a pesar de que la Policia Municipal ha recibido la orden de desalojarles si lo intentan.