Nada por descontar
SANTIAGO CARCAR, En el mercado de valores madrileño no queda nada por descontar. La subida de 0,31 centésimas en los tipos de interés de las letras del Tesoro a un año, por ser un hecho esperado, apenas si tuvo reflejo en las cotizaciones. Éstas mantuvieron una clara tendencia al descenso durante toda la mañana. Descontado todo lo negativo (incertidumbre, coyuntura política, tipos de interés), la Bolsa, en manos de los escasos inversores que deciden apostar en agosto, subió por pura inercia. Tímidamente al principio, pero con más decisión a medida que se acercaba el cierre. No obstante, el volumen de negocio, escaso, resta consistencia a un índice que ayer recuperó casi dos puntos.
La sesión, aburrida, sólo tuvo dos punto de interés: el corro en el que se negoció Campsa y la aplicación sobre un millón de títulos de Asland efectuado por Siaga. Campsa, causa de polémica entre la rectora de la Bolsa de Madrid y la comisión de valores en la jornada precedente, subió un 10%, fijando cambio al 1.595%. La sesión de hoy, aniversario del amargo trago que supuso para la renta variable la invasión de Kuwait por Irak, amenaza con ser tan aburrida como las precedentes. Los habituales del parqué confían en que las ausencias y la guardia relajada propicien buenas oportunidades para ganar mucho gastando poco.
