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El Atlético controla su euforia ante un Mallorca que aspira a un triunfo histórico en la Copa

Atlético de Madrid y Mallorca se juegan esta tarde algo más que la Copa del Rey. La final, que se disputará en el estadio Santiago Bernabéu (20.30 horas, La 2), supone para ambos un compromiso histórico. Los madrileños, que reconocen su condición de favoritos, pero controlan su euforia, tienen la oportunidad de conseguir el primer título de la era Gil. Los mallorquinistas quieren estrenar las vitrinas de su club tras 75 años de existencia. El Atlético posee mejores jugadores, pero el Mallorca le tiene tomada la medida este año. El conservadurismo de los sistemas augura un juego aburrido, pero cargado de emoción.

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Los jugadores del Atlético de Madrid, según informa José Miguélez, cobrarán tres millones de pesetas por conseguir el título. La plantilla se considera superior y asume su papel de favorita, pero elude la euforia. Ante la tradición histórica del club de combinar extrañamente las grandes proezas con los mayores fiascos han optado por afrontar el choque con total concentración. Tras eliminar al Real Madrid y al Barcelona, pretenden evitar que la teórica inferioridad del Mallorca se convierta en confianza y relajación. El grado de concentración es tal que jugadores como Paulo Futre se niega a realizar ningún tipo de declaración para evitar cualquier cuestión que pueda distraerle.Iselín Santos Ovejero, el técnico rojiblanco, se enfrenta a un reto personal. Con sólo tres actuaciones al frente del equipo puede conseguir un título, la séptima Copa del Atlético. Con todo, no niega que Tomislav lvic tendrá gran parte de responsabilidad en el éxito si al final se produce. Ovejero está convencido de que las dos derrotas en la Liga ante el Mallorca se tornarán en victoria en la Copa.

El técnico asume que, por las características defensivas del Mallorca, el Atlético tendrá que llevar la iniciativa: "El sistema no debe cambiar, porque el equipo tiene su propio sello. Sobre ese estilo el equipo puede ser más ofensivo, más agresivo o más defensivo. Jugaremos más ofensivos y esperemos que el Mallorca no haga de matasellos".

Tres jugadores del Atlético se presumen en principio como decisivos. Mejías, que ha recibido numerosas críticas por sus errores en el último partido ante el Barcelona; Schuster, que será vigilado estrechamente y que puede ser el primer jugador que gane la Copa con tres equipos distintos; y Futre, cuya rapidez se considera fundamental para romper el entramado defensivo del Mallorca.

El Real Mallorca, según informa Patricio Candia, intentará hoy conquistar la primera Copa del Rey en sus 75 años de historia deportiva. Todos consideran que las posibilidades de derrotar al Atlético son elevadas si el equipo mantiene el nivel de los últimos compromisos y logra sustraerse a la importancia de un partido definido como "del siglo" en Baleares.

El club balear, modesto y acostumbrado a luchar por la permanencia, tiene una oportunidad histórica de escribir una página de oro en el fútbol español. Hace un mes los Isleños luchaban por eludir la promoción a Segunda, hoy tienen a su alcance la Copa del Rey. "El secreto es creer siempre en tus posibilidades y no esconder la cara; eso es precisamente lo que haremos en Madrid", aseguró Lorenzo Serra Ferrer, el técnico.

El Mallorca afronta la final con todos los pronósticos en contra e incluso jugará en la propia ciudad de su rival, pero en la expedición reina el optimismo. Miguel Contestí, presidente del Mallorca, que dará un millón de pesetas a cada jugador en caso de ganar la final, dijo ayer: "Ya es un mérito haber llegado a la final; ahora tenemos que ganarla".

Alineaciones probables:

Mallorca: Ezaki; Serer, Del Campo, Fradera, Pedraza; Nadal, Marcos, Soler, Parra; Alvaro y Hasan.

Atlético de Madrid: Mejías; Tomás, Ferreira, Juanito, Solozábal, Ton¡; Vizcaíno, Schuster, Orejuela; Manolo y Futre.

Árbitro: Ramos Marcos.

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