Las figuras del cine español, en una nueva serie de Diego Galán para TVE

Queridos cómicos es el título de una nueva serie para TVE cuyo rodaje acaba de concluir Diego Galán, periodista, crítico de cine y director del Festival de Cine de San Sebastián desde 1985 a 1989. El espacio es, en cierta manera, la segunda parte de otro similar que realizó hace 15 años sobre el cine español. En esta ocasión está centrado en 22 estrellas y se emitirá junto a los dos capítulos dedicados al cine erótico y político que Carlos Robles Piquer prohibió emitir en 1977.

Senillosa no logró que se autorizara la emisión de los capítulos prohibidos. Pertenecía al consejo de RTVE en tiempos de la UCD. Él los vio y no le parecieron escandalosos. En ellos se abordaban las películas donde era posible el amor, porque durante el régimen anterior había sido imposible: quienes conculcaban la norma no podían seguir vivos, se morían. Aparecían muchos puños y muchos felpudos en fragmentos de películas de Gutiérrez Aragón, Olea, Camino o Garci... sobre la guerra civil, la transición o la realidad social española y en los destapes de Nadiuska, María José Cantudo, Ágata Lys o Susana Estrada.Todos estos pasajes inéditos se podrán ver el próximo año dentro de la nueva serie que ha acabado de rodar Diego Galán sobre el cine español. En esta nueva versión, que ahora se encuentra en fase de montaje, Galán vuelve a recuperar viejos celuloides de nuestra historia cinematográfica para adornarlos con entrevistas en profundidad a sus mejores estrellas.

Las mismas mentiras

Están desde Ana Belén a Rafaela Aparicio, de Imperio Argentina a Carmen Maura, José Sacristán, Fernando Fernán Gómez... hasta 22, más las intervenciones de otros 40 actores y directores de escena. Falta Pepa Flores. "Me citó, pero me dio plantón. Le dije que estábámos en el mismo barco, que éramos víctimas los dos de las mismas mentiras. Le dije: '¡Venga, vamos a sentarnos y hablar de ello!'. Me dio plantón", se lamenta Diego.Por contra, los encuentros más gratificantes han sido los de Concha Velasco, Joselito, Carmen Sevilla o Sara Montiel, que permitió rodar -en 16 milímetros que serán pasados a vídeo- sin velo en la cámara. Cada uno de ellos ofrece un retrato del cine y la sociedad española a través de sus filmes, sus memorias gráficas y sus relatos -por qué hicieron eso, por qué lo otro, de qué viven ahora...- contados en su ambiente, como Francisco Rabal, que habla desde las minas murcianas donde creció.

El retrato de las estrellas ejecutado por Galán tras estos encuentros es que no han vivido del cine ni han sabido capitalizar su éxito. "No se daban cuenta de que era pasajero, y la mayoría de sus familias se lo chupaban todo. Lo que más me ha impresionado es que continúen haciendo el papel de estrellas y no pierdan en ningún momento la compostura, porque es su medio de trabajo". Aun así, Galán encuentra muchos méritos: "Entonces se hacían películas valientes. Hoy, con tres millones de parados, no se ha hecho ninguna que lo refleje".