Ben-Ami: "Sin sirios y saudíes una conferencia regional no tiene sentido"

ShIomo Ben-Ami, embajador de Israel en España, expresó ayer serias dudas de que pueda celebrarse una conferencia regional sobre Oriente Próximo, "ya que Siria no acepta el plan Baker y los saudíes no están interesados en ella". "Sin Sirla y sin Arabia Saudí una conferencia regional no tiene sentido", dijo Ben-Ami, "por lo que habrá que apostar por la negociación de un sólo carril, es decir, un diálogo directo entre Israel y una delegación jordano-palestina. El rey Hussein es una pieza clave para la paz, ya que Jordania tiene una dimensión claramente palestina".El embajador intervino en un almuerzo-coloquio organizado por el Club Siglo XXI, donde reiteró la propuesta del Gobierno Shamir de conceder un período transitorio de autonomía de tres años a los palestinos en los territorios ocupados "para pasar posteriormente a discutir una solución definitiva".

El diplomático israelí rehusó entrar en detalles sobre el contenido de dicha autonomía, pero recordó que Shamir dijo en una entrevista reciente que "la autonomía es todo, menos Defensa y Asuntos Exteriores". Y añadió: "Shamir no descarta que un futuro primer ministro de Israel -él tiene ya 76 años- acepte el principio de paz por territorios, algo que el actual jefe de Gobierno no puede aceptar filosóficamente".

Ben-Ami explicó las reticencias de Israel a la presencia de Europa en una conferencia regional "para restringir el marco y evitar que se convierta en una conferencia internacional" y acusó a los gobiernos europeos de no tener "la sensibilidad necesaria hacia nosotros".

En términos especialmente duros hacia el Gobierno de Francia -de quien dijo que "está de luna miel con Arafat"- manifestó: "¿Por qué le vamos a dar entrada a Dumas [ministro francés de Exteriores]? ¿Porque Mitterrand quiere jugar el papel de emperador?"

Admitió Ben-Ami que la creación de nuevos asentamientos en los territorios ocupados, a la que se opone la Administración estadounidense, forma parte "de la filosofía del Gobierno de Israel. Otra cosa es su aplicación".