El Joventut demostró una superioridad absoluta sobre el Taugrés
El Joventut devolvió la normalidad a la Liga con una cómoda victoria sobre el Taugrés. El equipo de Vitoria suele tener actuaciones como la de ayer, en las que no disputa el partido, sino que lo deja transcurrir a la espera de los acontecimientos. Eso, con un rival como el verdinegro, es lanzarse a una derrota segura. El Taugrés pareció más aquel lamentable conjunto que deambuló por la fase final de la Copa que el que destrozó el pasado domingo el mito del Real Madrid.Tres primeros minutos de concentración defensiva y un par de triples de Sibillo fueron la respuesta visitante a un hipermotivado Joventut. Durante el resto del partido siempre estuvo entre los 15 y los 20 puntos por debajo y sólo la fortuna en los instantes finales, aliada con el relajamiento local, hizo que la diferencia en el marcador fuera muy inferior a lo que se vio en la pista.
Villacampa, en una gran primera parte, dirigió a los suyos hacia la victoria con canastas de todo tipo. De tres, de dos, en bandeja, para tiro adicional... Sumó 20 puntos en el primer periodo. Encima, secó a Roth, uno de los mejores anotadores del rival.
Ya en la segunda parte, un amargado Roth cometió dos acciones punibles contra Villacampa, la segunda de las cuales fue acompañada de una técnica por protestar. Para dejar claro que no era su noche, Pressley, en los minutos en que quedó emparejado con él, le rompió la cintura con fintas que le dejaron clavado. Las locuras de Laso acabaron por desquiciar a sus compañeros. Sus entradas hacia ninguna parte encontraban siempre el tapón oportuno a tan suicidas acciones. Brown no parecía muy satisfecho con la dirección del juego. Pero, cuando buscaba la solución en su banquillo, encontraba pocas respuestas.
En el juego interior tampoco pudo dominar el Taugrés cuando Ferran tomó la distancia exacta en la que debía moverse para eludir a Rivas. Ante la dificultad para hacer circular el balón de los visitantes, el Joventut respondía con un juego de contragolpe desarrollado en la línea vertical y con escasos pases que tuvo su colofón en una brillante acción de Thompson que levantó al público de su asiento.
Mal pinta esta eliminatoria para el Taugrés. Sería necesario que los de Vitoria se autoconvencieran más y creyeran de verdad que pueden hacer algo más que estar en las semifinales. Eso podría ser posible, pero más complicado será reducir la mentalización del equipo de Sainz. Algunos de sus jugadores, caso de Villacampa, actuaron como pocas veces en los últimos años.
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