Los conductores del Insalud se niegan a llevar a los médicos para atender las urgencias domiciliarias
Los conductores del servicio de urgencias del Insalud se encerraron ayer y se negaron a trasladar a los médicos a los domicilios en los que se requería asistencia facultativa urgente. Los trabajadores protestan así por la decisión del Insalud de cambiar sus turnos de libranza cuando ambas partes están inmersas en un proceso negociador. En la centralita de 061 (teléfono de urgencias) el responsable médico afirmaba que la demanda se estaba cubriendo "con los medios disponibles". Algunos médicos aseguraron anoche que acudieron en taxi a los domicilios donde era requerida su presencia.
El plante de los conductores se inició a las cuatro de la tarde de ayer, cuando se puso en práctica una orden cursada el viernes par el director de gestión y servicios generales del 061, Antonio Maturana, por la que se cambiaban los turnos de libranza de forma que los conductores descansaran un domingo de cada cuatro y no uno de cada tres, como venían hac'endo hasta ahora.Esta iniciativa unilateral del Instituto Nacional de la Salud (Insalud), que llega en pleno proceso de negociación, encrespó los ánimos de los 30 conductores del turno de tarde, que decidieron encerrarse en el parque móvil del Insalud, en la calle de Francisco de Madariaga, y negarse a atender los avisos de urgencia. Todos los sindicatos, salvo UGT, apoyan la protesta.
El trabajo de los encerrados consiste en trasladar a los médicos del servicio de urgencia a los domicilios en los que es requerida su presencia a través del 061. En situación normal, los vehículos están apostados en cada uno de los 20 centros de atención de urgencias repartidos por Madrid. Ayer por la tarde, y al cierre de esta edición., sin embargo, estaban encerrados en el parque móvil.
La mayoría de los avisos recibidos en el parque móvil no fueron atendidos, según constató este diario. Sin embargo, el responsable médico de la central (del teléfono de urgencias, situado en la calle de Lope de Rueda, perpendicular a la de Alcalá, aseguró que la demanda estaba siendo atendida "con todos los medios dispombles", aunque rehusó precisar cómo.
La misma fuente dijo que la demanda de urgencias "se estaba cubriendo sin problemas".
Silencio en los ambulatorios
Al menos tres médicos del servicio aseguraron que habían acudido a atender las urgencias en taxis dispuestos por la central del 061, tanto para la ida como para la vuelta. En el ambulatorio sítuado en la calle de Vicente Muzas (Ciudad Lineal), el encargado del servicio aseguró que se estaba cubriendo la demanda, pero al ser preguntado si se hacía en los coches oficiales del Insalud prefirió guardar silencio. La misma actitud fue la adoptada por miembros de otros cuatro puestos de urgencias. El encierro se mantendrá hasta que el Insalud revoque la orden del cambio de libranza, según el sindicalista Carlos Gusoni.
El colectivo de conductores agrupa a 200 trabajadores, que cubren cuatro turnos de trabajo con unos 25 coches en cada uno de ellos.
Los representantes sindicales aseguraron ayer que el plante había sido adoptado por la citada orden, que llega tres días antes de que se celebre una reunión para negociar entre la dirección del Insalud y los trabajadores del 061. Estas conversaciones se iniciaron después de que los empleados de urgencias desconvocaran una huelga prevista para Semana Santa, debido a que el Insalud aceptó negociar sobre cuatro puntos (homologación de horarios, aplicación de un nuevo sistema retributivo, posible privatización del servicio e integración en los equipos de atención primaria), según Paco Bravo, de CC OO. Las conversaciones afectan a los 800 trabajadores del 061.
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