El Gobierno de Albania justifica los sucesos de Shkodra

El Gobierno albanés acusó ayer implícitamente a la oposición de haber atacado la sede del Partido del Trabajo en Shkodra antes de que, desde el citado edificio, se disparara contra los manifestantes el pasado martes, causando al menos cuatro muertos y más de medio centenar de heridos. El portavoz del Gobierno, Genz Kondi, manifestó ayer que "ambas partes habían disparado" y reconoció la cuarta muerte por estos incidentes.El próximo domingo se celebrará la segunda ronda de laselecciones generales, para dilucidar la atribución de 18 escaños en distritos en los que ningún candidato alcanzó la mayoría necesaria. Entre aquellos que acuden a la segunda ronda está el primer ministro, Fatos Nano. El resultado del domingo no alterará de forma significativa la relación de fuerzas en el Parlamento, donde el Partido del Trabajo cuenta con una sólida mayoría absoluta de 162 escaños sobre un total de 250.

El portavoz del Gobierno justificó la intervención de las fuerzas de seguridad contra las "manifestaciones ilegales" que, de forma espontánea, se habían producido el lunes y martes en protesta por lo que la oposición considera un fraude electoral.

Kondi manifestó que "se está investigando quién disparó primero" y si "había gran cantidad de armas en la sede comunista". Pero sugirió que, de haber existido tal arsenal en el interior, sus ocupantes habrían disparado más sobre la masa de manifestantes y que habría mas bajas. "Parece contradictorio que, teniendo las armas que ahora se dice, no hicieran uso de ellas", ante el asalto por parte de la población que finalmente ocupó, incendió y destruyó por completo la central comunista en Shkodra.

Los ocupantes huyeron por un pasadizo subterráneo descubierto posteriormente por la población. De no haber habido tales depósitos de armas en la sede del Partido del Trabajo de Albania en Shkodra, es difícil imaginar de dónde pudieron sacar los asaltantes las armas que aseguran haber requisado en el interior del edificio. EL PAIS pudo comprobar el miércoles en la localidad citada que desde camiones se repartían fusiles Kalashrilkovs a civiles.