_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

La doble moralidad

Los bolsistas viven convencidos de que la recesión no será tan fuerte como la producida a principios de los setenta porque si bien los países han frenado las tasas de crecimiento, se mantienen en niveles positivos. Esperan desenlaces con nivelado optimismo. En todo gran proyecto financiero, el pecado original se desdibuja con el tiempo, y en el caso de las fortunas bursátiles que ahora se deprecian está, además de la tensión política internacional, la responsabilidad de la propia industria de valores. El mercado expía sus propios pecados, como lo demuestra el escaso éxito de las últimas ampliaciones y emisiones de convertibles. Las sociedades atrapadas por la crisis no han conseguido ampliar su base accionarial, que es el principal objetivo perseguido en las apelaciones al mercado. El discurso teórico de los operadores en estos momentos olvida un pasado muy reciente, al estilo de los próceres que se ocupan de grandes temas sociales y ecológicos después de devastar riquezas naturales. El ejemplo más claro de esta doble moralidad lo ofreció el gran financiero James Galdsmith, al anunciar un día los desastres naturales del siglo sin acordarse de que su inmensa riqueza se, originó talando muchas hectáreas (le bosques en el centro de Europa.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_