Ardanza asegura que la posibilidad de un Gobierno sólo con el PSOE "ha desaparecido".

El lehendakari en funciones, José Antonio Ardanza, declaró ayer en Vitoria que las posibilidades de cerrar un acuerdo de Gobierno bipartito con el PSE-PSOE han desaparecido. Casi al mismo tiempo, Euskadiko Ezkerra hizo público en el Parlamento vasco que las coincidencias con el PNV tras la reunión mantenída el jueves "habían sido plenas". Satisfacción que también expresó EA tras el encuentro celebrado ayer con la delegación peneuvista. El Partido Socialista de Euskadi, por su parte, sostiene que no entrará bajo ningún concepto en un Gabinete a tres bandas con PNV y EE.

La formación de un Gobierno de mayoría nacionalista para el País Vasco comienza a perfilarse como una posibilidad seria tras los primeros contactos realizados por el PNV con otras fuerzas políticas y las declaraciones de sus diferentes portavoces. El lehendakari, José Antonio Ardanza, fue muy explícito ayer al descartar definitivamente el acuerdo PNV-PSE, aunque dejó la puerta abierta a que este último se integre en un tripartito con Euskadiko Ezkerra. Una posibilidad que, sin embargo, los socialistas no están dispuestos a aceptar. La postura oficial del PSE en este momento es contraria a la formación de un Gobierno de coalicíón junto a la sexta fuerza de la comunidad. Sólo aceptarían conversaciones con el PNV para repetir coalición.Euskadiko Ezkerra, por su parte, se mostró ayer absolutamente esperanzada en que el acuerdo definitivo con el PNV se consiga en breve. Tras una primera reunión que tanto el presidente del partido, Juan María Bandrés, como el secretario general, Kepa Aulestia, calificaron de plenamente coincidente, EE se sentará junto al PNV para seguir negociando la próxima semana.

Además, Bandrés se apresuró ayer a dar garantías de unidad y alejar el fantasma de la ruptura y de la disensión interna. Tras la jornada electoral del 28 de octubre, en EE surgieron "diferentes sensibilidades", en palabras de Bandrés, que se materializaron en dos líneas, que pugnan por el acercamiento al PSE o a EA. Bandrés, cabeza de la línea socialista, descartó ayer la posibilidad de una tormenta en el seno de su formación por el hecho de que el PSE no fuera la tercera pata de la coalición. "Garantizo", dijo, "que, si hemos podido consensuar con otros partidos, también vamos a poder consensuar entre nosotros".

En ese caso, el partido que dirige Carlos Garaikoetxea estaría dispuesto a cerrar uÍn acuerdo con el PNV de forma rápida, El diputado por EA Joseba Azkarraga explicó ayer, tras la reunión con el PNV, que habían coincidido en el diagnóstico de la problemática del País Vasco que había hecho la delegación del partido de Xabier Arzalluz, y en que el Gobierno a construir debía hacerse desde la lealtad de los socios. La próxima semana volverán a reunirse.

Para Aulestia, un Gobierno en minoría PNV-EE, con el apoyo puntual de un tercero, sería la última de las posibilidades a poner en marcha. Un juego al que podría prestarse el Partido Popular. Su presidente en el País Vasco, Jaime Mayor Oreja, criticó ayer al PSOE, y declaró que su partido se esforzará en facilitar la estabilidad de las instituciones vascas.

El PNV decidirá el próximo miércoles, en la sesión ordinaria de su ejecutiva, la línea definitiva de trabajo a seguir y los partidos que deberán integrar la coalición, con el objetivo de acelerar el proceso de formación del Ejecutivo.