El debate sobre el estado de la ciudad no profundizó en los grandes problemas de Madrid
El primer debate que realiza el Ayuntamiento de Madrid sobre el estado de la ciudad sólo sirvió para discutir las relaciones de los socios del equipo de gobierno (PP y CDS), la eficacia de las visitas del alcalde a los ministros del Gobierno de la nación e incluso los efectos de los 10 años de Gobierno socialista. No se trataron, sin embargo, los grandes problemas de Madrid, sobre los que la oposición se limitó a "pasar de puntillas".
El PSOE e IU aprovecharon el pleno para iniciar su campaña preelectoral y ofrecieron un adelanto de sus programas con la vista puesta en las elecciones del 26 de mayo.El pleno no sirvió para adentrarse en la situación de la vivienda, el transporte, los servicios sociales o la cultura tras 17 meses de Gobierno de centroderecha. Los portavoces de la oposición, que empezaron sus intervenciones desgranando críticas concretas, cayeron enseguida en la confrontación política y en la anécdota personal.
Francisco Herrera, portavoz de IU, tenía preparada una lista con los 20 fiascos del equipo de gobierno y una relación con otras tantas preguntas, tales como la disposición del centro-derecha a convocar un referéndum sobre el tráfico o de acabar con las disputas quemantienen los concejales Fernando Bocanegra (CDS) y Ángel Matanzo (PP). Otros temas que quería conocer eran tan dispares como saber si el primer teniente de alcalde es consciente de que "ha pasado de la nada a la más absoluta miseria" o interesarse por la situación de la casa de oficios de Fuencarral.
"Aquí no gobierna nadie", concluyó Herrera. "El centro derecha ha refundado la CNT en el Ayuntamiento. A fuer de ser liberales, anarquistas". El portavoz de IU, al igual que el socialista Juan Barranco, incidió en los discursos contradictorios que mantienen PP y CDS y aseguró que los concejales hacen una política descoordinada y personalista.
Barranco sigue sin olvidar la moción de censura que le arrebató el puesto de alcalde y le convirtió en portavoz de la oposición. Dedicó gran parte de su discurso a poner su gestión municipal por encima de la de Rodríguez Sahagún.
Pasa a la página 3
Barranco ironizó sobre las visitas del alcalde a ministros
Viene de la página 1"Ustedes intentaron hacer un hipotético Gobierno de salvación municipal que nadie les había pedido y que no era necesario", achacó Barranco. "Los hechos han demostrado que, lejos de ser una gestión caótica, la nuestra fue acertada y coherente".
Tampoco olvidó referirse a la próxima cita electoral. Si Herrera había hecho un llamamiento a los ciudadanos para que con su voto "remediaran" la actual situación, el ex alcalde aseguró que en los próximos comicios los grupos coligados, "por su mala gestión, sus actuaciones impopulares y su desprecio a los ciudadanos, van a perder la confianza que les queda".
El portavoz socialista criticó irónicamente el intento de Rodríguez Sahagún de sacar un beneficio político de sus visitas a los ministros. "Yo no voy a presumir nunca de ello, y eso que estoy informado antes y después de estas conversaciones. De hecho, todos los planes realizados en colaboración con la Administración central y que actualmente desarrolla el Ayuntamiento fueron firmados bajo nuestro mandato".
El centrista José Luis Garro, tercer teniente de alcalde, defendió los 17 meses de gestión comparando en cifras aspectos tan diversos como el número de árboles plantados, de aparcamientos subterráneos construidos o de viviendas levantadas bajo el mandato socialista y el de PP-CDS. "Ha habido cambios cuantativos importantes", aseguró.
Estado de ansiedad
Al no exigírsele una respuesta en profundidad sobre los problemas de la ciudad, Garro utilizó gran parte de su intervención para defender a Rodríguez Sahagún y atacar al PSOE. "Este Ayuntamiento ha sido la Cenicienta del Gobierno de la nación. El papel que desempeña el actual alcalde es muy importante. Usted", dijo a Barranco, "no hacía ese papel, sino que actuaba como acólito del Gobierno. A la vista de cómo ha planteado este debate, usted confunde el estado de la ciudad con el de su ansiedad", aseguró.
José María Álvarez del Manzano, primer teniente de alcalde y portavoz del PP, fue el último en intervenir. Lo que había oído hasta ese momento, según dijo confirmaba sus temores de que el debate no iba a servir para nada. "Ustedes lo que buscan es un titular de prensa", dijo a la oposición. "El espíritu preelectoral anida en sus almas".
Álvarez del Manzano tan sólo leyó uno de los 50 folios que llevaba preparados, el referido a los pactos PP-CDS que, según dijo, van a ser mantenidos hasta la celebración de las próximas elecciones "por lo menos". "No se trata de una cuestión de oportunismo, sino del convencimiento de que lo que se acordó sigue vigente". A pesar de esta declaración, Barranco insistió en que ambos socios quieren romper lo pactos, pero "ninguno quiere apretar el botón rojo".
Aunque el pleno había previsto la presentación de proposiciones, el debate se cerró sin aprobar una sola resolución.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
