Anguita invita a dimitir a los dirigentes sevillanos que piden la disolución del PCE
Julio Anguita, secretario general del Partido Comunista de España (PCE), invitó ayer a los miembros del Comité Central del PCE Eduardo Saborido y Javier Aristu, sin citarlos -defensores de la inmediata disolución del PCE, así como a los demás miembros de la dirección del partido en Sevilla que comparten esta tesis-, a dimitir de todos sus cargos si no aceptan defender la decisión mayoritaria de mantener el partido.
El actual secretario general del PCE sevillano, Eduardo Saborido, y el ex secretario general Javier Aristu fueron los únicos que votaron ayer en contra de las propuestas de la cúpula del PCE, que se resumen en compatibilizar el trabajo "a tope", en expresión de Anguita, en la construcción de Izquierda Unida con el funcionamiento del PCE como generador de debates y propuestas políticas.Eduardo Saborido, uno de los fundadores de CC OO y condenado en el proceso 1.001, abogó por la disolución del PCE, de acuerdo con una propuesta de la dirección del partido en Sevilla, en su intervención del martes por la tarde ante el comité central reunido en Madrid, pero su iniciativa sólo tuvo el respaldo de su compañero sevillano, Javier Aristu. En la votación del informe político de Julio Anguita, que defiende la pervivencia del PCE, sólo Saborido y Aristu votaron en contra. Otros cuatro miembros, de los 100 que asistían a la reunión del comité central, se abstuvieron y todos los demás apoyaron a Anguita.
En su intervención de resumen de lo debatido, éste advirtió públicamente que "quienes no estén de acuerdo con lo aprobado por la mayoría, y máxime si las bases ratifican lo acordado, no pueden continuar en ningún cargo dirigente y deben dimitir".
El dirigente comunista exclamó desde la tribuna de oradores que el PCE "es un partido nacido para morir", pero a continuación desdramatizó la aseveración al indicar que no está pensando en el horizonte del año que viene sino en un futuro en el que ya no sea necesario ningún partido político.
Según el líder comunista, el papel que le corresponde al PCE a partir de ahora es el de garante del pluralismo dentro de ese "movimiento sociopolítico", como definió a IU.
El máximo órgano del PCE entre congresos nombró a Francisco Frutos coordinador del secretariado, con unas facultades que de hecho ponen en sus manos el Gobierno cotidiano del partido con el propósito de dejar a Anguita con más tiempo disponible para ejerce su papel de coordinador general de IU y de presidente de su Grupo Parlamentario en el Congreso de los Diputados.
Falta de coordinación
Después de una reunión de más de tres horas entre sendas delegaciones del PCE y del PSUC, el secretario general de los comunistas catalanes, Rafael Ribó, reiteró por la tarde su convencimiento de que el Partido Comunista de España no ha desarrollado como debía la coordinación con otras fuerzas de izquierda de ámbito autonómico y en concreto calificó como una insuficiencia "la infravaloración del diálogo abierto con Euskadiko Ezkerra para conseguir un acuerdo electoral".Esta valoración forma parte de una resolución aprobada el pasado fin de semana por el comité central del PSUC y Ribó defendió ayer su vigencia incluso después de haber conversado largamente con Julio Anguita, que discrepa de esta tesis.
A diferencia de la actitud mantenida por Anguita ante el comité central del PCE, Ribó no se mostró atemorizado de que prospere en el PSUC el debate sobre la posible disolución de este partido ante la consolidación y ampliación de Iniciativa por Cataluña.
Rafael Ribó, que quiso eliminar cualquier sospecha de crisis en las relaciones con el PCE, afirmó que los respectivos partidos tienen el propósito de buscar soluciones a sus discrepancias, si bien insistió en el derecho de cada uno a elaborar opiniones propias sobre la política de alianzas con otros grupos de izquierda.
