Una fotografía protestada

La fotografía recoge el instante en que una ráfaga de viento levanta las faldas de una mujer que camina hacia una escultura de Julián Besteiro. Al fondo, un hombre desplaza un cuadro. El pie de la fotografía señalaba lacónicamente: "Exposición de Julián Besteiro en el parador de Carmona". La fotografia fue publicada el pasado 29 de septiembre en la primera página de los cuadernillos de la edición de Andalucía y de la edición nacional, y no apareció en el resto de las ediciones. La publicación de esa fotograria suscitó una carta de rotesta al director de EL PAÍS firmada por un nutrido grupo de políticos e intelectuales que asistían al homenaje a Julián Besteiro realizado el pasado fin de semana.Los firmantes de la carta señalan que la instantánea fue tomada cuando las dos personas "estaban atendiendo el trabajo del fotógrafo, que había solicitado su ayuda para captar una buena imagen de la exposición que acompaña al homenaje". Y añaden: "La imagen tan poco digna que ofrece de estos dos trabajadores y en particular de la mujer sólo puede interpretarse como una falta total de respeto hacia la dignidad de esas personas y en particular cbmo una manifestación de machismo muy poco coherente con lo que debería ser la línea de su diario, sin que ninguna ironía política pueda justificarla".La carta está firmada por Gregorio Peces Barba, Elías Díaz, Amelia Valcárcel, Ludolfo Paramio, Solita Salinas de Marichal, Emilio Lamo de Espinosa, Roberto Dorado, Santos .Juliá, Fernando López Agudín, José Bono, Francisco Fernández Marugán, José Félix Tezanos, Dolores Renau, Luis Rodríguez Zúñiga, Andrés de Blas, Matilde Fernández Sariz, Antonio García Miralles, Carlos Sanjuán, Javier Arenillas, Joaquín Martínez Bjorman, Amparo Rubiales, Justo Zambrana, Antonio Claret García, Ángeles Aparici, Antonio Cuevas, Milagros Frías, Alfredo Herrera, Carmen Gago, Mercedes Sanjuambenito, Pilar Guerrero, Celestino del Arenal, Carmen Ojeda, Manuel Fernández González, María Rodríguez Gil, Ana Arnaiz, Carmina Fornelino y Lucía Oliver Jiménez.

La decisión de publicar la fotografía fue tomada por el redactor jefe del departamento, Raúl Cancio, que consideró que era una "buena instantánea" y llamó a la Redacción de Sevilla para subrayar la "calidad" de la fotografía.

"No creo que sea hiriente ni ridícula para las personas fotografiadas. Tiene el principal ingrediente del fotoperiodismo: la espontaneidad de lo irrepetible. En ningún momento consideré que tuviera elementos de ironía política. Me puedo equivocar y herir la sensibilidad de la persona fotografiada, pero no creo que en la fotografia se atente contra el pudor de la persona, ya que está completamente tapada por una combinación, pese al vuelo de la fálda", señaló Cancio al Ombudsman.

El Defensor del Lector estuvo tentado de reproducir la fotografia, a fin de que los lectores pudiesen hacerse una idea cabal de la polémica. Si no lo ha hecho es porque, dado el carácter radicalmente subjetivo del asunto planteado, existía el riesgo de que ello fuera interpretado como una reincidencia en la ofensa. El Ombudsman no comparte el criterio de que la fotografía sea ofensiva, aunque entiende la queja de la persona fotografiada, más aún si ésta considera que ha sido sorprendida en su buena fe.

Por otra parte, el criterio de publicación de una fotografia que no aporta ninguna información a los hechos que ilustra -los preparativos del homenaje a Besteiro en Carmona- es muy discutible.

La movilización de tan importantes personalidades de la política y la Universidad en la protesta por la fotografia comentada, además de ser un gesto de solidaridad con la persona afectada, tal vez sea un reflejo del creciente recelo entre importantes sectores de la sociedad y los medios de comunicación. Recelo mutuo que en el caso de los políticos e informadores ha llegado a un nivel que seguramente exigiría un debate que ayude a serenar los ánimos y delimitar los ámbitos de los derechos y las libertades de todos.

Televisión y boxeo

Un lector atento ha llamado al Ombudsman para preguntar si ha cambiado la política informativa de este diario respecto al boxeo. El lector se declaraba sorprendido porque en las páginas de televisión del pasado domingo se destacaba, entre otros programas, la emisión Pressing boxeo, que emite Tele 5. Esa recomendación le parecía una flagrante contradicción con el Libro de estilo de este periódico, que, en su primer capítulo, afirma que "no se publicarán informaciones sobre la competición boxística, salvo las que den cuenta de accidentes sufridos por los púgiles o reflejen el sórdido mundo de esta actividad. La línea editorial del periódico es contraria al fomento del boxeo, y por ello renuncia a recoger noticias que puedan contribuir a su difusión". La alarma o ilusión, quién sabe, del atento lector no estaba justificada. El Ombudsman ha sido informado de que el diario no ha cambiado de política respecto al boxeo. La inclusión de la recomendación en las páginas de la programación de televisión fue un error que se procurará que no vuelva a suceder. Sólo aparecerá referencia al boxeo enla programación de las cadenas.