Magic Johnson
El base de los Lakers aspira a estar en los JJ OO de Barcelona
Earvin Johnson, Magic, el mítico y veterano base de Los Angeles Lakers, considerado uno de los mejores jugadores de baloncesto del mundo, recomendó ayer en Madrid su fórmula mágica para el triunfo: "Mirar, escuchar y trabajar duro". Magic Johnson, un hombre simpático y sonriente, de 31 años y 2,06 de estatura, visitó ayer por primera vez España para firmar un contrato con una empresa cárnica que se desarrollará a lo largo de los próximos dos años hasta la celebración de los Juegos Olímpicos de Barcelona, en los que anunció que tiene previsto participar. Ni el jugador de baloncesto, al que nada más llegar a Madrid le vistieron con un chándal azul oscuro con el logotipo de la empresa, ni los directivos de la misma quisieron hacer público el acuerdo económico al que han llegado.Procedente de Los Ángeles, Johnson llegó por la mañana a Madrid, donde estampó formalmente su firma en el contrato, por el que se ha comprometido a dar clases prácticas a escolares españoles durante 1991 y 1992. El jugador viajó luego a Barcelona, donde fue la estrella en el nuevo pabellón olímpico Sant Jordi, que estrenó con una canasta simbólica.
En las comparecencias ante la prensa, Johnson mostró su deseo de participar en los Juegos Olímpicos de Barcelona, los primeros a los que tendrán acceso los grandes profesionales de la NBA, y dijo que sería una gran decepción si no, lo consigue. "Si no hay lesiones ni ocurre nada inesperado, estaré en Barcelona 92", prometió el jugador norteamericano.
En contra del calificativo, Magic, que le puso un periodista de Lansing, su ciudad natal en Michigan, y por el que ya es conocido en el mundo entero, dijo que no se consideraba mágico, aunque reconoció que sí tiene una manera mágica de enseñar a los niños. "Los niños quieren ser escuchados, queridos y sometidos a una disciplina. Ése es el camino mágico".
Jugador de los Lakers desde 1979, equipo en el que piensa terminar su carrera deportiva, Magic Johnson contestó con un sí rotundo cuando se le preguntó si se consideraba el alma y líder del equipo de Los Ángeles, del que dijo que espera que supere sin problemas la fase de transición tras la retirada del mítico jugador Karen Abdul Jabbar y la marcha del técnico Pat Riley, sustituido para esta temporada por Mike Dunleavy. Sin embargo, no tuvo empacho en reconocer que el equipo con más futuro en la liga profesional norteamericana, debido a la juventud de sus componentes, es el Detroit Pistons, que destronó a los Lakers en 1989.
A pesar de que arrastra tras de sí múltiples y rutilantes trofeos (hombre de la década de los ochenta, mejor jugador de la NBA en tres ocasiones, número uno de asistencias en el juego y un largo etcétera), Magic Johnson no se considera el mejor jugador del mundo. "Estoy entre los mejores, aunque todo depende de los ojos del espectador", dijo este hombre con grandes negocios en su país y que ha rechazado numerosas ofertas para hacer cine.
El jugador se sorprendió de la expectación que su visita ha despertado en España, e hizo gala de un gran sentido del humor y simpatía. En la conferencia de prensa, Johnson, después de contestar a cada una de las preguntas, se dirigía a los periodistas con frases como las siguientes: "Te pareces a Pat Riley", le dijo a uno; "¿Me enseñas a jugar al ajedrez?", le preguntó a otro; "Me encanta cómo mueves las manos", o "Si el chico de rosa me ofrece un papel en un guión suyo, lo aceptaré".
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