La fiscalía antidroga pide el procesamiento de 49 presuntos narcotraficantes por la Operación Mago

La Fiscalía Especial para la Prevención y Represión del Tráfico llegal de Drogas solicitó ayer el procesamiento de 49 personas que aparecen implicadas en el gran sumario 13/90 contra el narcotráfico, abierto por la Audiencia Nacional como consecuencia de la Operación Mago, iniciada el pasado 12 de junio. La petición fiscal se basa en la existencia de presuntos delitos contra la salud pública, contrabando, blanqueo de dinero, tenencia ilícita de armas, falsificación de documento mercantil y falsificación de moneda. El juez Baltasar Garzón, titular del Juzgado de Instrucción número 5 de la citada audiencia, considerará esta petición cuando regrese de vacaciones, la próxima semana, y redacte los correspondientes autos.

Sólo cinco de los 54 implicados en los hechos revelados por la denominada Operación Mago quedan, por el momento, fuera del sumario 13/90. Se trata de Marcial Dorado Baúnde, Marcial de la Isla, Michel Haengi, Miguel Rivero González, Luis Falcon Pérez, Falconetti, y Tomás Leis Carlés. Para los tres primeros, es decir, Dorado, Haengi y Rivero, la Fiscalía pide a la Audiencia Nacional que abra diligencias separadas del sumario 13/90. Ello se debe, según ha podido saber este diario en medios judiciales, a que los indicios que se deducen contra estas personas de las actuaciones practicadas se refieren a posibles delitos de blanqueo de dinero cuya gran dificultad probatoría podría retrasar el desarrollo del resto del sumario.Para Luis Falcón Pérez y Tomás Leis Carles la Fiscalía pide la libertad incondicional y sin fianza. Ambos seguirán, sin embargo en prisión, donde se encontraban antes de la gran redada del pasado mes de junio. Luis Falcón, en la cárcel donostiarra de Martutene, donde espera juicio por un asunto de 1.000 kilos de hachís y Tomás Leis en la de Pontevedra, donde se encuentra por un caso de 500, kilos de la misma droga.

El 'arrepentido'

El arrepentido Ricardo Portabales Rodríguez menciona a Falconetti en sus declaraciones, que sirven de punto de partida para el sumario 13/90, únicamente de forma vaga en relación con un asunto de 2.500 kilos de hachís que Portabales conocía de oídas y sin precisión. También son vagas y relativas a presuntos delitos menores las referencias a Leis Carles hechas por Portabales. Se da la circunstancia de que éste y Leis coincidieron en la cárcel de Pontevedra, en 1989, donde el segundo participó presumiblemente en alguna de las agresiones que sufrió el arrepentido antes de que fuera trasladado a Madrid.

Portabales ha acusado asimismo a Marcial Dorado Baúnde de ser el destinatario de una partida de 14.000 kilos de hachís que se importó en dos viajes, pero se ha mostrado incapaz de precisar esta imputación. En un momento declara que cree que la droga llegó en un barco que se llamaba Marcial Dorado o sólo Dorado y en otro posterior afirma que le parece que oyó que la droga era para Dorado. Esta es, presumibiemente, la razón por la que Marcial, notorio contrabandista de tabaco, incurso en el sumario 11/84 por contrabando, seguirá pendiente de diligencias .sólo por los importantes envíos de dinero a Suiza que las autoridades helvéticas detectaron en junio de 1989. Aquella investigación, bautizada como Peseta Connection, implicaba también al comerciante suizo de tabacos Michel Haengi y fue archivada en Basilea hace ahora un año. Las autoridades judiciales españolas pretenden continuarla aquí, pero al margen del sumario 13/90. Las declaraciones de Portabales no parecen haber aportado ninguna información significativa.

También es lavado de dinero el delito de que Portabales acusa a Miguel Rivero González. El arrepentido ha afirmado ante el juez que este empresario vigués, propietario de una empresa de transportes, blanquea hasta un 60% de los beneficios del narcotráfico gallego, pero la falta de precisiones suplementarias, la multiplicidad de los negocios y el carácter complejo del delito imputado ha hecho que el caso Rivero quede, como los dos anteriores, apartado del ya intrincado sumario abierto tras la Operación Mago. Tanto Rivero como Dorado fueron puestos en libertad bajo fianza poco despues de ser detenidos.

Hay, sin embargo, una persona para la que la Fiscalía aprecia indicios de delito de receptación o blanqueo y cuyo procesamiento se pide. Se trata de Wael Ibrahim Abdelkader el Khalout, detenido en relación con un alijo de 500 kilos de cocaína, durante la segunda fase de la Operación Mago.

Los restantes 48 posibles procesados lo son todos por delito contra la salud pública, es decir, por tráfico de drogas. En otros dos implicados, Celso Barreiros Rodriguez y Narciso Fernández Hermida, la Fiscalía aprecia, además, indicios de tenencia ¡lícita de armas, y en el caso de Manuel Charlín Pomares, un posible delito de falsificación de moneda.

Manuel Cobo del Rosal, abogado de Celso Barreiros, manifestó ayer a este diario que lamenta que no se haya "esperado un poco, en atención a la debilidad de las pruebas de cargo existentes y a la absoluta'necesidad de que se profundice en la investigación instructora, dado que, hasta el momento, la defensa no ha visto practicada ninguna de las pruebas solicitadas por ella". Varios defensores no pudieron ser localizados anoche y otros, como Gonzalo Rodríguez Mourullo, abogado de Carlos Goyanes, y Enrique Bearriud, abogado de Portabales, se reservaron su opinión.

Por su parte, Michael Haengi, manifesto desde Basilea: "Me siento satisfecho de que al final se demuestre que la Justicia es la Justicia. Reitero que sólo soy un vendedor de tabaco y que sigo dispuesto a hablar con el juez Garzón siempre que no se me pida que viole las leyes que protegen el secreto comercial en mi país".