Récord mundial de Francia en 4 X 100

El equipo francés recuperó de forma espectacular su larga tradición ganadora en el relevo 4 X 100. Su victoria entraba dentro de los pronósticos, pero nadie podía esperar un récord del mundo en esta prueba. El milagro sucedió. Cuatro atletas de raza negra -Moriniere, Truabal, Sangouma y Marie Rose- consiguieron la única plusmarca mundial de estos Campeonatos de Europa. Su registro, 37J9, superaba en cuatro centésimas el primado que estableció Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles. De aquella ocasión siempre quedará en el recuerdo la fantástica curva de Calvin Smith en la tercera posta y la confirmación de la cuarta me dalla de oro de Carl Lewis, una hazaña que sólo había conseguido lesse Owens.Francia siempre se ha sentido orgullosa de su relevo. En los peores años de su atletismo, y con velocistas de medio pelo, su cuarteto era capaz de competir por un lugar entre los mejores del mundo. La tradición nació en la década de los sesenta con cuatro velocistas inolvidables: Bambuck, Fenouil, Delecour y Piquemal. Con la excepción de Bambuck, el resto del grupo no pasaba de discreto. Pero quizá nunca un equipo ha alcanzado tanta perfección y fluidez en las entregas de los testigos. Su precisión les convirtió en una leyenda que ha dejado escuela.

El equipo actual está integrado por velocistas excelentes, aunque ninguno de ellos alcanza las cotas de los norteamericanos. A su crédito individual los franceses unen su vieja finura en el pase del relevo, aspecto que decide el orden final de una carrera en la mayoría de las ocasiones.

Pese a todo, el ejercicio del cuarteto francés no fue perfecto. Truabal, tercer relevista, se echó casi encima de Marie Rose en la entrega del palo, pero una mezcla de reflejos y decisión salvó un momento muy dificil. Gran Bretaña, con Christie, no pudo recuperar la desventaja, en gran medida porque su técnica es muy inferior a la francesa. El peso de la técnica se ha advertido esta temporada en los sucesivos intentos del equipo de Carl Lewis y Leroy Burrell -el Santa Mónica- por conseguir el récord del mundo. Todos sus intentos se han saldado con fracasos, pese a la enorme calidad de los cuatro atletas de EE UU.

Del resto de pruebas destaca la victoria de Galindo Bordin en la maratón, con un tiempo de 2.14.02, carrera en la que los españoles José Esteban Montiel y Francisco Romero fueron quinto y décimo, respectivamente. En los 5.000 metros, nueva exhibición de otro italian o, Salvatore Antibo (13.22.00), vencedor también de los 10.000 metros. El español Abel Antón fue decimoprimero.

En los 1.500 metros femeninos, el oro correspondió a la joven atleta local Snezana Pajkic, con un registro de 4.08.13. En el relevo femenino 4X400, la RDA impuso su supremacía, al igual que la Gran Bretaña, en categoría masculina, que culminó la prueba con un récord de Europa (2.58.22). El salto de longitud presenció el gran triunfo de un joven júnior, Dragutin Topic, con un vuelo de 2,34 metros. En lanzamiento de disco el oro fue para un alemán oriental, Jürgen Schult, que colocó su herramiento a 64,58 metros. El medallero final registró el dominio de la RDA (34 medallas, 12 de oro), seguida de la Gran Bretaña (18, 9 de oro) y la UR SS (22, 6 de oro).