La risa de Occidente .
Todos los años mueren 40 millones de personas de hambre y enfermedades relacionadas con el hambre. Esta cifra equivale a más de 300 accidentes de jumbo al día sin supervivientes en los que la mitad de los pasajeros fueran niños.Pero para Kohl, Mitterrand, Bush... (que, acompañados de sus respectivas, han ido a celebrar el hundimiento del comunismo a la 161 cumbre económica del Grupo de los Siete, o club de los millonarios, al tiempo que analizaban concienzudamente cómo sacar tajada de ello sin arriesgar demasiado), la situación económica mundial es para congratularse.
Para la mayoría de la población mundial (que no son europeos, ni japoneses, ni norteamericanos) comer dignamente por lo menos una vez al día sí que debe ser todo un espectáculo. ¡Qué vergüenza!-