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Tour 90

Las incógnitas se desplazan a los Pirineos

Los Alpes terminaron como empezaron, con otro cambio de líder y, sobre todo, acortando las diferencias entre los primeros clasificados. La incógnita es si los Pirineos y la contrarreloj del último día, casi llana, sobre 45,5 kilómetros, acabarán definitivamente con la escapada de la primera etapa, que tanto ha beneficiado hasta ahora a Chiappucci y Pensec.Los Alpes han dejado esquirlas. Bauer, del que tanto se especuló sobre si resistiría, no pasó de la primera etapa montañosa. Pensec aguantó en la segunda, pero sólo gracias a la ayuda de Millar y llegó claramente tocado a la meta. Ayer acusó el esfuerzo. Aunque su caída no ha resultado tan aparatosa como la de Bauer, ha sido el principio de su fin. Por el momento, sólo ha resistido Chiappucci, con menos equipo que Pensec, pero bastante más astuto. Ha sabido dosificar sus fuerzas mejor. No le importó perder 38 segundos respecto a su directo rival en l'Alpe d'Huez porque prefirió subir a su ritmo tras empezar muy fuerte al pie del puerto. Con sus energías intactas, ayer, además de sacarle 2.45 minutos a Pensec, únicamente le superaron entre sus inmediatos perseguidores en la general Breukink (1.05), Delgado (3 5 segundos) y Lemond (nueve).

Mermadas ya las posibilidades de Pensec, la duda es si el italiano resistirá en las siguientes batallas de los Pirineos y la contrarreloj. De entrada, muy seguro de sí mismo, no cree que pase nada en la próxima montaña, p ues para él sólo hay una etapa dura, la de Luz Ardiden. Después, ya ha recordado que fue el séptimo contra el cronómetro en la última París-Niza y cuarto en la cronoescalada del pasado Giro. En resumen, se siente seguro y, más aún, con tantos minutos de ventaja.

Factura

Buen ejemplo de cómo la gran montaña puede pasar también factura de un día a otro la dieron ayer el propio Lemond, que volvió a ser derrotado por Delgado en una contrarreloj para escaladores, pero sobre todo para hombres de fuerza, y Bugno, que confirmó sus palabras de la jornada anterior en las que confesó que no se encuentra en la misma forma que en el Giro. Si el norteamericano cedió 26 segundos al español, el italiano se fue a los 2.12 minutos. Estuvo en todo momento fuera de los primeros puestos e incluso Alcalá, sufriendo lo indecible, perdió esta vez sólo 52 segundos respecto a Delgado, con lo que ahora vuelve a aventajar incluso a Bugno por cuatro segundos.

En cuatro minutos están ahora los aspirantes a que caiga Chiappucci. Breukink, después de dus dos demostraciones de ayer y anteayer, ha superado incluso a Lemond en la general por 32 segundos, a Delgado por 2.07 minutos, a Alcalá por 3.49 y a Bugno por 3.53. El holandés, que es un corredor completo, es el nuevo pilar a demoler.

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