Los integristas arrollan en Argelia y piden elecciones generales en 3 meses

La revolución integrista islámica se ha puesto en marcha en Argelia. El Frente Islámico de Salvación (FIS) ha pedido formalmente, a través de la prensa, la disolución de la Asamblea Nacional, la formación de una Asamblea constituyente y la celebración, en un plazo máximo de tres meses, de unas elecciones generales, previstas oficialmente para 1992. Esta es la primera consecuencia concreta del resultado de las elecciones comunales y regionales celebradas en Argelia el pasado día 12 y que dieron la mayoría al FIS.

En segundo lugar, pero a gran distancia, se situaron el Frente de Liberación Nacional -en el poder- y la Unión por la Cultura y la Democracia, de signo bereber (RCD). El ministro del Interior argelino, Mohamed Salah Mohamedi, confirmó a primera hora de la noche de ayer la supremacía del FIS", aunque remitió a hoy para dar a conocer los resultados oficiales. Todo apunta a que el FIS ha conseguido un 55% de los votos, mientras que el FLN, que funcionaba como partido único desde la independencia argelina en 1962, no superará el 35%. De los 612 municipios en los que anoche se había concluido el recuento, 327 quedan en manos integristas y 208 en las del FLN. Argelia cuenta con 1.541 asambleas municipales y 277 distritos provinciales, que a su vez se engloban en 48 regiones. Nadie lo esperaba. Todos los pronósticos apuntaban un triunfo electoral del FLN, seguido del FIS. Era el resultado lógico de una 'operación política iniciada en 1988 por el Gobierno de Chadli Benyedid, que pretendía asegurar la continuidad hegemónica del FLN, dentro de un marco democrático y pluripartidista. Los primeros síntomas de que algo raro sucedía en estas elecciones se detectaron en la madrugada del 12 al 13, cuando pocas horas después de cerrarse los colegios electorales se empezaron a notar algunos signos: se escucharon las bocinas de algunos automóviles recorriendo la ciudad a toda velocidad. A esa misma hora, Abasi Madani, líder del FIS, de 59 años abandonaba la sede de su partido, no sin antes asegurar que el proceso electoral había sido claro y limpio, que se iba a dormir y que confiaba en una victoria Madani se había olvidado en un instante de las continuas denuncias efectuadas durante toda la jornada electoral, según las cuales los interventores del FIS habían detectado numerosas irregularidades. La tasa de abstención, propugnada por los socialistas de Ahmed Ben Bella y por los bereberes, rondó el 40%. El actual Parlamento está integrado exclusivamente por miembros del FLN y las primeras elecciones generales multipartidistas no están previstas hasta 1992.