Amper creerá un 'holding' con todas las participaciones financieras de sus filiales

Amper, SA, la compañía participada por Telefónica que preside Antonio López, trabaja actualmente en la constitución de una sociedad holding que integrará todas las participaciones financieras de sus actuales filiales, cerca de una veintena de sociedades con un valor actual en libros de 30.000 millones de pesetas. La actual Amper, SA, que opera, en la actualidad como sociedad matriz, pasará a convertirse en un miembro más del nuevo holding bajo el nombre de Amper Telemática.

El planteamiento de Amper tiene por objeto adaptar la estructura jurídica del grupo a los nuevos requerimientos derivados de la ley del Mercado de Valores, que, entre otros aspectos, tienden a la consolidación de resultados. El proyecto supondrá, en consecuencia, un cambio en la cotización de Amper, de tal modo que la nueva sociedad holding sustituirá a la actual Amper, SA, dentro de bolsa.Por otra parte, el proceso de diversificación del grupo que preside Antonio López exige ahora un esfuerzo de racionalización, motivado por la reducción del peso específico que la propia sociedad matriz ha experimentado en relación al respeto de sus filiales. De hecho, en 1990 el volumen de negocio consolidado se estima en 60.000 millones de pesetas, de los que tan sólo unos 15.000 millones corresponden a Amper, SA.

La actual compañía matriz constituye, por tanto, una empresa con unos activos financieros muy superiores a sus activos industriales y está obligada a redimensionar su estructura operativa a raíz de la liberalización del mercado de terminales, que, en definitiva, representa su segmento básico de negocio. De ahí precisamante los problemas planteados después de que la empresa haya anunciado la posibilidad de no renovar contratos temporales.

Compras de Telefónica

En esta situación influye también la evolución del plan de medidas urgentes pactado con Telefónica a finales del pasado año y que contemplaba un volumen de compras a Amper, SA, del orden de los 8.000 millones de pesetas en 1990. De esta cantidad, los pedidos de Telefónica registrados durante el primer semestre sólo alcanzan los 2.500 millones. Como consecuencia, al cierre del primer trimestre, el volumen total de facturación de la compañía matriz era de 3.400 millones de pesetas, cerca de 1.000 millones de pesetas menos que los contabilizados durante el mismo período del pasado ejercicio.