Rubial lamenta la marcha de García Damborenea, pero apoya la sanción

El presidente del PSOE, Ramón Rubial, lamentó la decisión del ex dirigente socialista vasco Ricardo García Damborenea de abandonar este partido al no aceptar la resolución de la Ejecutiva federal de suspender su militancia durante dos años. La suspensión temporal había sido apoyada por Rubial con su voto, frente a la opción de la expulsión que se había planteado en la ejecutiva socialista.En opinión de Rubial, que asistió ayer en Bilbao a la presentación del libro La primera renovación. Intrahistoria del PSOE, García Damborenea no ha respetado las reglas y normas internas de funcionamiento del Partido Socialista. "En toda formación política hay unos estatutos y unas reglas de juego que es necesario cumplir", dijo. "Y las reglas de juego donde se critican es en el interior, donde la partida se juega. No ha sido así y yo lo lamento, como lamento", agregó, "toda separación de la gente que en el transcurso de su vida, acertada o desacertadamente, ha estado trabajando por lo que creía que era justo. Y digo que lo lamento", concluyó el presidente del PSOE, "más por él que por el partido".

El actual secretario general de los socialistas vizcaínos, Nicolás Redondo Terreros, sucesor de García Damborenea en el cargo, se declaró partidario de la defensa de las posiciones políticas de carácter crítico dentro del propio partido aceptando las decisiones que adopte la mayoría. "Los militantes socialistas, al igual que en otros partidos, cuando recogen su carné pierden parte de su propia libertad y tienen que acatar las decisiones y postulados admitidos por la mayoría", defendió.

Mediador

Tanto Ramón Rubial como Nicolás Redondo Terreros conocen a fondo al promotor de Democracia Socialista, diputado del Partido Socialista de Euzkadi por Vizcaya hasta las últimas elecciones legislativas. El presidente del PSOE es senador por esta provincia y en el pasado ha intentado mediar en numerosas ocasiones entre García Damborenea, instalado en una actitud crítica, y Txiki Benegas, representante de las tesis oficiales.

Nicolás Redondo Terreros ha sido durante años, al igual que el resto de los actuales dirigentes del socialismo vizcaíno, estrecho colaborador de García Damborenea. Pero el hijo del líder de la UGT varió su comportamiento hace ahora un año. Ayer se limitó a declarar que "para enmendar los errores que haya cometido y que cometa el PSOE, lo mejor es estar dentro del partido y acatar lo que dice la mayoría". En su opinión, un partido político "no se cambia de la noche a la mañana y desde esa base deberiamos de saber todos que el esfuerzo es diario y cotidiano".