Evangelio y Apocalipsis
Dos obras maestras del cine moderno. Una fundacional, El evangelio según Mateo, de Pier Paolo Pasolini. Otra crepuscular, Apocalypse now, de Francis Ford Coppola. Quien las conozca, se sentirá por fuerza algo defraudado ante el empequeñecimiento de su tremenda fuerza por la trituradora televisiva, pero quien no las conozca llenará con ellas una laguna fundamental en su entendimiento del cine actual.Nada más opuesto que una y otra película, no ya en el asunto argumental (la vida de Cristo y un enigmático relato de aventuras de Joseph Conrad traladado al infierno de Vietnam), sino en el estilo, en la mentalidad de sus creadores, en su lenguaje, en la naturaleza de sus imágenes. Y sin embargo son dos obras hermanas, dos monumentos de paz y de libertad.
Las delicadas imágenes elegiacas que crea Pasolini para transmitirnos -desde su ateismo- su amor por Jesús de Nazaret y las tumultuosas imágenes barrocas que crea Coppola para transmitirnos -desde su odio- el horror de la guerra, son capítulos esenciales del cine. El tiempo no los corroe, sino que les añade vigencia. Son por ello filmes cada día más jóvenes, cada, vez que se ven más inéditos.
Y a su manera, cada uno es un monumento de religiosidad, hecha por descreídos, por hombres que saben descubrir el espíritu de toda religiosidad. De ahí que sean obras libres, dos mazazos, uno de lirismo y otro de pesimismo trágico, de exaltación de la libertad, uno desde una metáfora del comienzo del tiempo y otra del final del tiempo: Evangelio y Apocalipsis, comienzo y final.
El evangelio según Mateo se emite el viernes a las 21.30 en Antena 3, y Apocapypse now, el sábado a las 22.15 en TVE1.
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