Mejora la relación entre las distintas instituciones para la organización olímpica

"La tensión necesaria para organizar los JJ OO no se convertirá nunca más en presión", manifestó ayer el presidente del comité organizador de los Juegos de 1992 (COOB), Pasqual Maragall, al término de la visita a Barcelona de la comisión del Comité Olímpico Internacional (COI) que controla la marcha del proyecto olímpico. Maragall, que calificó a la mesa de trabajo COI-COOB como "el auténtico estado mayor" de los JJ OO, afirmó que en las reuniones de ayer y anteayer entre ambos organismos "se han puesto las bases para generar la confianza y desterrar la desconfianza". El presidente del COI, Juan Antonio Samaranch, no escatimó elogios a la organización de los Juegos, aunque eludió pronunciarse sobre las palabras de Maragall.Preguntado por dos veces sobre si compartía la tesis de Maragall, el presidente del COI evitó cualquier respuesta directa. La primera ocasión en que le fue requerida su opinión al respecto, en la conferencia de Prensa que ayer, al término de las dos jornadas de reuniones COI-COOB, ofrecieron conjuntamente los presidentes de ambos organismos, Samaranch se limitó a señalar que "todos debemos ser conscientes de que estamos en el mismo barco y de que el éxito de los Juegos Olímpicos será un éxito para todos".

Al ser reiterada la cuestión, Samaranch no tuvo ocasión de responder. Maragall terció para precisar sus palabras anteriores. "Al hablar de presiones", dijo el alcalde de Barcelona, "me refiero a presiones en general, no unidireccionales. Éste es un proyecto rodeado de una presión excesiva del entorno. Ahora entramos en una fase en la que los mecanismos de colaboración creados nos han de hacer huir de mensajes basados en la incertidumbre".