Demasiados problemas juntos

Los mercados de valores continúan sin tener un proyecto claro a medio plazo y esta situación hace que cualquier aspecto negativo les afecte particularmente. Si el jueves era la subida de las letras del Tesoro la que paralizó a los inversores, ayer fue un nuevo recorte en la Bolsa de Tokio y el pequeño retroceso de Wall Street lo que hizo que el papel volviera a ganar fuerza y llevara al índice general a un nuevo nivel mínimo del año, fijado esta vez en el 254,04%.Como en días anteriores, fueron los valores bancarios los que pusieron mayor empeño en demostrar que las cosas andan mal por el mundo financiero y, en esta ocasión, contaron con el apoyo del sector de inversión, que tampoco salió muy bien librado ante el desigual enfrentamiento entre papel y dinero. Con esta nueva baja, el sector bancario ha acumulado unas pérdidas del 25,71% en este ejercicio, frente al 14,34% del conjunto del mercado.

Los sectores industriales aguantan con mejor fortuna la constante salida de papel, aunque en algunas ocasiones los apoyos han resultado evidentes, sobre todo en aquellos valores que todavía se contratan a través de los corros tradicionales.

Las aplicaciones no fueron demasiado numerosas ni importantes en esta jornada, pero afectaron a la práctica totalidad de los sectores.

Las expectativas para la semana próxima no ofrecen variaciones, lo que puede obligar a los mercados a buscar más abajo el nivel que pueda servir de soporte a una posible reacción.