Unespa recomienda una subida del seguro del automóvil del 10% para este año

La patronal aseguradora Unespa, a través del presidente de su Agrupación de Automóviles, José Cercós, va a recomendar a todas sus entidades adheridas que apliquen en 1990 un incremento máximo del 10% en las primas que cobran por los seguros de coches.Esta recomendación se realiza después de las conversaciones mantenidas con la Dirección General de Seguros, que ha advertido que "seguirá con atención" los nuevos precios que se propongan.

El presidente de la Agrupación de Automóviles de Unespa y director general para España de Winterthur, José Cercós, que puso de manifiesto "la voluntad de los aseguradores por agotar cualquier vía antes de recurrir a la subida de precios", destacó el reto que supone intentar que en 1990 el aumento de las tarifas no exceda del 10%.

"Si la experiencia demostrase durante el transcurso del año una evolución distinta", precisó, "las correcciones deberían hacerse a partir de ahí y sobre la base de hechos contrastados".

Tras afirmar que ese 10% de subida es tan solo una recomendación, "porque en una economía de libre mercado ya no son posibles los acuerdos sectoriales en cuestiones tarifarias", Cercós dijo que dicho porcentaje se ha asumido después del informe actuarial que la Agrupación de Automóviles de Unespa presentó a la Dirección General de Seguros, en el que se analiza la frecuencia media de siniestralidad y el coste medio del siniestro entre 1987 y 1990, y del que se derivan las primas de riesgo para 1990.

En una circular que Unespa empezó a enviar el pasado lunes, la patronal resalta que "la Dirección General de Seguros no ha manifestado que seguirá con la máxima atención las bases técnicas que en el futuro le sean presentadas por las entidades aseguradoras". En esa misma circular se indica además que "deberán especificarse los nuevos gastos de gestión".

Con relación a las comisiones que pagan las compañías a los agentes y corredores de seguros, Cercós resaltó el compromiso asumido por el consejo que agrupa a estos profesionales, en el sentido de aceptar una reducción de los porcentajes que perciben sobre el importe de la prima pagada. Paralelamente, las aseguradoras se muestran dispuestas a intentar bajar sus gastos internos.