Los taxistas de Madrid quieren ser catalanes

Los taxistas de Madrid están tan calientes como los motores de sus coches después de un atasco. Hace unas semanas aparecían en las paredes de Madrid pintadas reivindicativas de los asalariados para pedir más licencias; ahora se recogen firmas para conseguir una bajada de bandera similar a la de los barceloneses. "No es normal que en Barcelona cueste 225 pesetas subirse a un taxi y aquí sólo valga 105". El precio de la bajada de bandera aumentó este año cinco pesetas en Madrid y 15 pesetas en Barcelona (en la capital catalana el marcador no avanza hasta haber recorrido dos kilómetros). Es ridículo que algunos trayectos, si suben cuatro personas, sea más barato que el autobús". Los taxistas consideran que las mejoras salariales que han obtenido sus compañeros de Barcelona se deben a que están más unidos que ellos. En el área metropolitana de Barcelona, que agrupa a 27 municipios, hay 11.000 licencias para una población de tres millones de personas. Los ingresos de un taxista catalán son de unas 13.000 pesetas diarias de media, según la Administración. En Madrid hay 15.000 licencias para tres millones de personas.El rosario de demandas de los taxistas no finaliza ahí: "Queremos más gasolineras de butano para repostar; sólo hay dos de momento". Allí están más unidos. Ninguno quiere decir cuánto sacan de media. Algunos de los taxistas consultados, excepto Nicomedes García, dicen que el tráfico está mejor desde que el pasado verano entró el nuevo equipo de gobierno. Nicomedes le explica: "Aunque no le queráis reconocer, la circulación está mejor; por lo menos ahora están los municipales en la calle que antes no los veías". "Si el coche anda a menos de 25 kilómetros por hora (la velocidad media de Madrid es de 122,5 kilómetros) significa que está trabajando a precio de reloj y entonces se pierde dinero".

Los taxistas también quieren arreglar el problema de las dobles filas, que dificultan su trabajo, "al cliente y a nosotros nos cuesta más cara la carrera".

Respecto a la inseguridad ciudadana, los taxistas reconocen que los trabajos nocturnos, con un aumento de 65 pesetas el viaje, "no nos compensan del riesgo a tener un atraco o un accidente".

Un grupo de taxistas recorrió el pasado lunes, con sus vehículos a paso nnuy lento, varias calles del centro de Madrid para expresar su protesta por la agresión que sufrió ese mismo día un compañero, según informó la Policia Municipal. Su estado fue calificado de muy grave.