Nueva York no siguió la caída de Tokio

El fuerte descenso, en casi 1.500 puntos, por parte de la Bolsa de Tokio produjo una ola de ventas en las bolsas europeas que hizo temer a los operadores una repetición del lunes negro. No obstante, las bolsas recuperaron la calma y al cierre quedaron con moderadas pérdidas, e incluso en el caso de Londres y París los índices arrojaron saldos positivos.Queda así patente que los mercados bursátiles occidentales comienzan a desligarse de lo que pueda ocurrir en Japón. La corrección por la que atraviesa el mercado de Tokio se debe a problemas internos en Japón relacionados con la situación política, la debilidad del yen, que cotizó al 149 yenes/dólar contra 147 del día anterior, y la posible elevación de los tipos de interés.

Por su parte, en Wall Street las cotizaciones tendieron al alza desde el inicio de la sesión, al contrario de lo que cabría esperar. Aparentemente, la desinversión que se está produciendo en Tokio se está redirigiendo a Estados Unidos. De esta forma, el índice Dow Jones cerró la jornada con una subida superior a. los 38 puntos y se situó en 2.602,48. Los mercados. de bonos, asimismo, tuvieron un buen comportamiento, lo cual hizo que numerosos operadores emitieran juicios algo más positivos sobre la bolsa norteamericana. En efecto, según la analista Elaina Garzarelli, de la firma Shearson Lehman, se podría producir un rally durante las próximas semanas.

Otro factor, valorado de forma positiva por los mercados bursátiles, ha sido el resultado de las elecciones en Nicaragua y el posible levantamiento de las sanciones por parte del gobierno norteamericano. Además se espera que las autoridades norteamericanas hagan públicas esta semana datos macroeconómicos que deberían confirmar que el peligro inflacionista puede ser controlado.