Dos personas mueren despeñadas en Navacerrada tras resbalar por el hielo

Vicente Revuelta Ferrades y María Pilar Rodríguez Correa murieron al mediodía de ayer al caer por el precipicio de los tubos de Río Seco, una peligrosa zona cercana al pico de la Bola del Mundo, en Navacerrada. Los fallecidos, que formaban matrimonio, paseaban por la ladera cuando Vicente Revuelta cayó por la pendiente rocosa tras resbalar en una placa de hielo. Su esposa se precipitó poco después al intentar ayudar a su marido, informó la Cruz Roja. En el mismo punto han muerto, en las últimas semanas, otras tres peirsonas y cinco más tuvieron que ser rescatadas.

Los tubos de Río Seco, situados junto a la Bola del Mundo y a unos 400 metros de altura sobre la carretera que une Navacerrada con el puerto de Cotos, son una zona reputada como peligrosa. Según la Cruz Roja, en lo que van de año cinco personas han muerto despeñadas en este punto. "Todos los accidentes tienen la misma causa", explica un miembro de los equipos de rescate de la institución. "Cuando en la zona se forman placas de hielo, la gente resbala y se despeña". Vicente Revuelta, de alrededor de 50 años de edad, y María del Pilar Rodríguez, de 40, paseaban por los tubos cuando el marido se precipitó por la pendiente. Según las declaraciones de algunos testigos, su mujer se asomó al precipicio para intentar ayudarle. "Le gritaron que no se moviera pero fue inútil, también resbaló".Los cuerpos de los fallecidos, que vivían en Arganzuela, según el Gobierno Civil de Segovia, fueron encontrados a 150 metros de distancia uno del otro y muy cerca de la carretera de Navacerrada a Cotos. "Creemos que debieron morir en el acto, porque la ladera esconde muchas piedras bajo la nieve y la caída fue de 400 metros", explica la Cruz Roja.

Según esta versión, los fallecidos iban calzados con unas botas de après-ski con la suela lisa y "poco adecuadas para andar sobre el hielo". En uno de los bolsillos de Revuelta se encontraron las llaves de un coche Talbot que anoche estaba siendo buscado por la Guardia Civil. "Lo más probable es que dejaran el coche en Navacerrada y subieran a la Bola del Mundo en telesilla", dice un miembro de la unidad alpina de Cruz Roja. "Desde allí la gente suele bajar paseando".