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La familia Navas reclama la propiedad de una parte del solar previsto para la construcción de las torres KIO

Juan Carlos Sanz

La familia Navas, propietaria de una finca expropiada en 1946 para construir los accesos a la estación de Chamartín, ha reclamado a la Administración la reversión de una parcela de 280 metros cuadrados que no se utilizó para tales fines. Estos terrenos se incluyen hoy en el solar donde el grupo KIO proyecta construir dos torres y otros dos inmuebles con más de 123.000 metros cuadrados de edificabilidad. El precio del metro cuadrado en la zona alcanza las 300.000 pesetas.

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Los herederos de Leoncia Navas han presentando sucesivas reclamaciones ante el Ministerio de Transportes en los últimos meses, y anuncian próximas acciones judiciales para recuperar 280 metros cuadrados que hoy podrían valer más de 800 millones de pesetas.Un portavoz de la familia Navas insiste en que, según la ley, el Estado esta obligado a devolver a sus anteriores propietarios aquellos terrenos expropiados para un determinado fin público que finalmente no se ha llegado a realizar. "Este es el caso de los terrenos que fueron expropiados a mis familiares", destaca el mismo portavoz, al tiempo que muestra el acta de ocupación del solar, fechada el 4 de marzo de 1946. La Administración expropió entonces 1.080 metros cuadrados a los herederos de Leoncia Navas, que poseían una finca de 10.275 metros cuadrados en el pueblo de Chamartín de la Rosa (término municipal de Madrid en la actualidad), para la obra denominada Enlaces ferroviarios de Madrid, estación de Chamartín y sus accesos.

La familia Navas se dirigió el 28 de noviembre de 1988 al Ministerio de Transportes para recordarle que, según los datos del registro de la propiedad, una franja de 280 metros cuadrados no fue ocupada para el fin que motivó la expropiación: la apertura de la calle de Agustín de Foxá.

En el inicio de un intercambio de recursos y resoluciones que se prolongó durante ocho meses, el ingeniero jefe de la Junta de Construcciones del Ministerio de Transportes contestó a la familia Navas que su petición adolece de varios defectos formales, como la justificación de sus derechos hereditarios. Los reclamantes se apresuraron a subsanar los fallos con una prolija descripción de su árbol genealógico.

Denegaciones y demoras

El 5 de julio de 1989 los reclamantes denunciaron la mora o retraso en la actuación de la Administración, paso obligado para emprender acciones en vía judicial. Sin embargo, el Ministerio de Transportes declaró la "improcedencia" de la reversión al no constar la existencia de terrenos sobrantes".Hasta octubre de 1988, 44 años después de la ocupación de los terrenos, la Administración no practicó la primera inscripción de dominio de la finca expropiada a los Navas. Mientras tanto, la Dirección General del Patrimonio del Estado inició el expediente de defensa patrimonial 12/88. En un plano incorporado al expediente, se aprecia la existencia de tres parcelas que no fueron ocupadas para construir los accesos a la estación de Chamartín. Junto a la de los herederos de Leoncia Navas, figuran otras dos a favor de María Teresa de la Vega Rivero y de Esperanza Sánchez-Carrascosa, respectivamente.

Hace apenas un mes, el Ministerio de Transportes recurrió el acuerdo del Ayuntamiento de Madrid del pasado 2 de noviembre por el que se aprobó el proyecto urbanístico para desarrollar el área de las torres de KIO. El Ministerio reclamó la titularidad de una parcela de 1.080 metros cuadrados, que hasta ese momento se atribuía la compañía Urbanizadora del Norte (Urbanor), controlada por KIO.

El subdirector general del Patrimonio del Estado, Vicente Santamaría de Paredes, señalaba en julio pasado que para traspasar la propiedad de la parcela al Ayuntamiento, como pretendía en un primer momento el Ministerio de Transportes, era necesaria su desafectación como bien de dominio público. Esta medida obligaría a ofrecer a reversión a los dueños primitivos o a sus herederos.

La asociación de vecinos San Cristóbal, de la plaza de Castilla, afirma que otros tres solares, que suman junto al anterior unos 10.000 metros cuadrados, siguen perteneciendo al Estado. La asociaciación vecinal reclamó en consecuencia la anulación del acuerdo municipal que autorizó la urbanización de la zona.

A la luz de estas reclamación la familia Navas volvió a solicitar el pasado día 13 el derecho de reversión de la parcela sobrante.

La empresa Prima Inmobiliaria, SA, controlada por el grupo KIO posee solares en la plaza de Castilla que suman 26.219 metros cuadrados. Sobre ellos pretende edificar dos torres gemelas y dos edificios con un total de 123.400 metros cuadrados de edificabilidad sobre rasante y otros 43.759 destinados a garages e instalaciones técnicas.

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Sobre la firma

Juan Carlos Sanz
Es el corresponsal para el Magreb. Antes lo fue en Jerusalén durante siete años y, previamente, ejerció como jefe de Internacional. En 20 años como enviado de EL PAÍS ha cubierto conflictos en los Balcanes, Irak y Turquía, entre otros destinos. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y máster en Periodismo por la Autónoma de Madrid.

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