Michael Jackson

ya no tiene precio. Todo lo relacionado con él se convierte en oro. O al menos eso demuestra el precio pagado por un empresario japonés de hostelería por un retrato del famoso cantante norteamericano. En efecto, Hiromichi Saeki compró la semana pasada en Los Angeles un cuadro realizado por el artista australiano Brett-Livingstone Strong en el que aparece Michael Jackson con un libro en la mano, y por él pagó la cantidad de 2,1 millones de dólares (unos 220 millones de pesetas). A pesar de ello, el empresario nipón cree que el cuadro es una ganga, y así lo declaró en una conferencia de prensa. "Michael Jackson no tiene precio. El cuadro es único en el mundo", aseguró Saeki, quien expondrá el cuadro en un edificio de su propiedad en Tokio.

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