El duque de Alba advierte sobre los riesgos de un "turismo de masas" en 1992
Jesús Aguirre, duque de Alba y comisario de Sevilla para 1992, advirtió ayer de los "altos riesgos" que puede correr la ciudad por la celebración de la Expo 92, y añadió que "habrá que tomar medidas de precaución" para evitar las consecuencias negativas que el impacto del "turismo efímero y de masas" ha tenido para ciudades como Venecia o Florencia.
La labor del duque de Alba al frente de la comisaría, y su decisión de que "el pabellón de Sevilla sea la propia ciudad", recibieron ayer el apoyo unánime de todos los partidos con representación municipal. Los portavoces municipales animaron a Jesús Aguirre en su proyecto de "pabellón disperso" de la ciudad de Sevilla durante los meses de celebración de la Expo 92. "No considero la felicitación municipal como una corona de laurel, sino como un cariñoso empellón para que sigamos por el camino iniciado", explicó el duque de Alba. Los conventos de San Clemente y Santa Inés y el edificio que alberga en la actualidad la estación ferroviaria de Plaza de Armas serán el eje del pabellón de la ciudad y acogerán diferentes exposiciones "unidas por un claro interés docente", señaló Jesús Aguirre, quien, según confirmó el alcalde, ha renunciado a recibir cualquier tipo de remuneración.
La comisaría de Sevilla para 1992 tiene muy avanzada la organización, en el convento de San Clemente, de una exposición pictórica sobre la vanguardia sevillana desde los años 50 hasta nuestros días.
En el convento de Santa Inés tendrán lugar dos exposiciones, una sobre la pintura sevillana en el Siglo de Oro, de Velázquez a Murillo, y otra basada en la orfebrería.
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