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Los asesinos de Muguruza pretendían matar en la misma acción a Esnaola e Idígoras

JOSÉ YOLDI/FRANCISCO MERCADO La reconstrucción del atentado contra los parlamentarios de Herri Batasuna, ocurrido el pasado 20 de noviembre, en el que resultó muerto Josu Muguruza y malherido Iñaki Esnaola, evidenció ayer que los terroristas no sólo dispararon contra ambos, sino también contra Jon Idígoras, que salió ileso. Las conclusiones a las que se ha llegado tras esta reconstrucción difieren notablemente, de la hipótesis barajada inicialmente por los investigadores, según la cual los agresores sólo pretendían matar a Esnaola, mientras Muguruza resultó muerto al cruzarse en la trayectoria de los disparos.

La prueba realizada ayer en el restaurante Basque del hotel Alcalá, de Madrid, demostró sin lugar a dudas que los proyectiles iban dirigidos contra los tres parlamentarios de HB citados, ya que las trayectorias no son convergentes hacia donde estaba sentado Esnaola sino divergentes entre sí.A la minuciosa reconstrucción de los hechos, que duró más de tres horas, acudieron además del juez, el fiscal, todos los parlamentarios de HB y personal del diario Egin presentes en el momento del atentado excepción de Iñaki Esnaola Este, que se recupera de las heridas sufridas, no asistió a la reconstrucción por prescripción de su médico, según fuentes próximas a HB. El facultativo consideró, que el hecho de revivir la agresión en el mismo lugar de los hechos podría perjudicar notablemente su recuperación psíquica e incluso física

También estuvieron presentes el abogado que representa a HB en el proceso, Kepa Landa y policías expertos en balística.

A principios del pasado mes de diciembre se realizó otra reconstrucción de los hechos, aunque no con los parlamentarios de HB, sino con inspectores de policía al hilo de las de declaraciones de los testigos y las informaciones proporcionadas por los camareros del local. Esa prueba resultó imperfecta por lo que se convocó la de ayer con los asistentes a la cena.

Dos fases

La simulación del atentado se realizó en dos fases distintas Una primera secuencia en la que se siguieron los pasos del atacante que se subió a la tarima para realizar los disparos contra Esnaola, y otra, en la que se reprodujeron los movimientos del agresor que se quedó abajo, uno de cuyos disparos mató a Josu Muguruza. Según testigos presenciales, ninguno de los presentes tenía una idea global de lo ocurrido. Unos habían visto a uno de los agresores y otros al otro, pero en conjunto, según estas fuentes, se ha llegado a determinar con bastante exactitud lo ocurrido el 20 de noviembre.

Las trayectorías de los disparos fueron trazadas con hilos desde los lugares desde donde los testigos afirmaron que se encontraban los terroristas en el momento del atentado hasta los orificios causados por los impactos en la pared. Esta técnica es la que ha permitido demostrar que los asesinos no sólo pretendían matar a Inaki Esnaola, como se creía en un principio, sino tarribién a Josu Muguruza y Jon Idígoras.

Una de las conclusiones más claras a las que se ha llegado es que la trayectoria del disparo que mató a Josu Muguruza es completamente distinta a las restantes, lo que evidencia que no fue un blanco casual. También se ha concluido que Idígoras tuvo mucha suerte al no resultar herido, pues varias de las trayectorias de los proyectiles pasan por el lugar donde estuvo sentado. Las investigaciones han determinado que este diputado electo de HB salvó su vida casi milagros amente" al tirarse tras oír los primeros disparos, según uno de los testigos.

Xabier Oleaga, jefe de prensa de HB dijo a la salida del Hotel Alcalá: "Hoy ha habido cosas importantes desde el punto de vista técnico. Naturalmente, tendrán repercusiones políticas, pero no digo más".

Ninguno de los representantes de HB quiso valorar la importancia de las conclusiones a las que se ha llegado en la reconstrucción de los hechos.

Los desagües del Estado

Idígoras manifestó ayer que la investigación "va más lenta de lo que prometió el presidente". "Felipe González hizo aquellas declaraciones tan rimbombantes de que los hechos iban a ser esclarecidos. Pues todavía estamos esperando. Que no ocurra lo que ocurrió con Santiago Brouard [su asesinato, el 20 de noviembre de 1984, sigue sin esclarecer]". "Nosotros", agregó, "igual que González exigió al presidente de El Salvador, Alfredo Cristiani, que esclareciese los asesinatos de los jesuitas en ese país, y que Cristiani ya ha aclarado echando la culpa a los militares, esperamos que González aclare este en tuerto".

"Esperemos", agregó, "que González sea capaz de aclararnos la cuestión de los fondos reservados, de los desagües. Será muy importante para todos que González nos aclare dónde están los desagües de la política del Estado, ya que cuando se aclaren dónde están los desagües podremos llegar a los culpables de estos asesinatos".

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