Primera visita a China de altos cargos de EE UU desde Tiananmen
El consejero del presidente norteamericano, George Bush, para asuntos de Seguridad Nacional, Brent Scowcroft, y el secretario de Estado adjunto Lawrence Eagleburger, llegaron ayer a Pekín para entrevistarse con los dirigentes de China. Es el primer contacto diplomático de alto nivel entre ambos países desde que EE UU los interrumpiera en junio pasado, tras la violenta represión en la plaza de Tiananmen del movimiento en favor de la democratización en China.
Entre los temas principales a tratar por la amplia delegación encabezada por Scowcroft y Eagleburger con los dirigentes chinos figura la reciente cumbre soviético-norteamericana celebrada en Malta. En una cena ofrecida ayer a los visitantes por el ministro de Exteriores chino, Qian Qichen, Scowcroft señaló que había viajado para "traer nuevos ímpetus y vigor a nuestras relaciones bilaterales y buscar nuevas áreas de acuerdo" y que "hablando como amigo no sería sincero si no reconozco que mantenemos profundas diferencias".
En Washington, al anunciar el viaje de los altos funcionarios a Pekín, y posteriormente a Japón, la Casa Blanca indicó: "Las consultas estrechas sobre cuestiones de alcance global son una característica importante de la política exterior de Estados Unidos". El comunicado agrega: "Aunque deplora la tragedia de la plaza de Tiananmen, el presidente [George Bush] considera a China como un país importante para los asuntos mundiales y ha decidido que era apropiado, y estaba. dentro del interés a largo plazo de EE UU, informar al Gobierno chino de sus conversaciones con el número uno soviético [Mijail Gorbachov]".
La delegación fue recibida en el aeropuerto por el viceministro de Exteriores, Liu Huaquiu.
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