Antonio pide a sus compañeros que jueguen hoy

Los jugadores del Real Madrid decidieron ayer disputar hoy el encuentro de Recopa ante el Paok de Salónica (19.30 horas, TVE 2) tras consultar el capitán del equipo, Fernando Romay, a Antonio Martín, hermano del fallecido. Este dijo que la voluntad de su hermano habría sido la de seguir adelante, e incluso mostró su deseo de actuar él también, hecho que algunos directivos descartan. "Lo hacen como un homenaje al espíritu de Fernando", dijo Lolo Sainz, manager del club. "No será un partido divertido, pero hay que seguir su ejemplo", señaló el técnico George Karl.

"Tarde o temprano tendremos que jugar", aclaró Biriukov. "Da lo mismo mañana [por hoy] que el sábado ante el Estudiantes". El club había tomado la decisión, ante la imposibilidad de aplazar el encuentro, de descargar la decisión en los jugadores, a pesar de que, de no acudir al choque, corría peligro la participación del Real Madrid en la Recopa.Los directivos del Paok, en cuadrado con el Madrid, el Partizán de Belgrado (Yugoslavia), y el Mulhouse (Francia), en un grupo del que saldrán dos de los semifinalistas del torneo continental, habían puesto en principio dificultades para retrasar la cita 24 horas, aunque más tarde parece que lo aceptaban.

En el curso de la jornada de ayer los jugadores fueron pasando por sucesivos estados de ánimo. Algunos opinaban que el encuentro con el Paok no debía celebrarse de ningún modo. Otros no eran tan radicales Antonio fue el que despejó todas las dudas con su pronunciamiento favorable en función de que, según él, Fernando así lo habría querido.

Carta de Petrovic

El yugoslavo Drazen Petrovic, compañero de Fernando Martín en el Real Madrid la pasada temporada, recibió la noticia de la muerte del pivot español en su habitación de un hotel de Orlando, Florida, donde su equipo, Portland Trail Blazers, se disponía a jugar un partido. "No podía creerlo",' dijo Petrovic a EL PAÍS. "Lo primero que hice fue coger el teléfono para tratar de conseguir un desmentido".

"Estoy triste. No puedo creer que nunca más volveré a verle. Era un hombre muy bueno, muy joven, y el mejor jugador de España", aseguró Petrovic. El jugador yugoslavo afirmó que la última conversación con Fernando Martín la mantuvo en el pasado mes de agosto, y que hablaron de su aventura en la NBA: "Él tenía experiencia. Me dijo que la NBA era muy difícil, y que había que ser muy fuerte en la defensa, pero que era una aventura muy bonita".

Petrovic, que dijo estar escribiendo una carta de pésame al Real Madrid, aseguró que una de las imágenes que siempre guardará de Martín sucedió en un partido de la pasada temporada contra el Snaidero, de Italia. Quedaban 10 segundos para el final y el Madrid perdía por un punto. Petrovic le pasó el balón a Antonio Martín, quien buscó un tiro, lanzó y falló. Todo parecía perdido, pero Fernando Martín agarró el balón con una mano y realizó un mate en el mismo movimiento, asegurando así una victoria en el último segundo. "Ése era Fernando; nunca se daba por vencido", dijo Petrovic.

Entierro a las once

Por otro lado, la autopsia practicada en la mañana de ayer al jugador desveló el grado de infortunio que tuvo el accidente: ninguna fractura en el resto del cuerpo, sólo un golpe en la base del cráneo que le provocó la muerte instantánea. El parte de defunción señala como causa de la muerte "traumatismo cranoencefálico, politraumatismo y shock traumático agudo". El jugador será enterrado hoy a las once de la mañana en el cementerio de La Almudena.

Su muerte abre, ahora, una nueva incógnita deportiva en el equipo, acosado por las lesiones y los imprevistos a lo largo de la temporada. Aunque los técnicos aún no han comenzado a estudiar el asunto, las primeras interpretaciones se centran en si el Real Madrid no deberá volver a modificar su pareja de americanos, compuesta por un alero (Frederick) y un base (Nutt). La ausencia de Fernando Martín y el golpe moral que ha sufrido su hermano Antonio parecen recomendar la presencia de otro hombre grande, otro pivot, que preserve al equipo del desequilibrio que sufre.