84 jóvenes murieron haciendo la 'mili' durante el primer semestre de este año

Ochenta y cuatro jóvenes que estaban realizando el servicio militar perdieron la vida durante el primer semestre de este año, según los datos facilitados por el Ministerio de Defensa. Esta cifra supone algo menos de la mitad de los 189 muertos que se produjeron en la mili a lo largo de 1988.

De los 84 fallecidos, 10 lo fueron en accidentes de carácter militar: tres por manejo de vehículos, dos por efecto de armas o explosivos, uno en actividades deportivas y cuatro por otras causas. La cifra de muertos en accidentes de carácter militar fue de 30 durante el pasado año, 13 de ellos en los seis primeros meses.

Un total de 63 jóvenes resultaron muertos en accidentes de carácter no militar entre enero y junio de 1989. La mayor parte de ellos, 57, fallecieron en accidentes de tráfico. El número de suicidios consumados ascendió a 11, dos menos que en el mismo periodo de 1988 y casi la mitad de los acaecidos el pasado año, 24.

Menos suicidios

Fuentes del Ministerio de Defensa destacaron que del análisis de estas cifras se deduce que continúa la tendencia descendente en el número de suicidios y accidentes de carácter militar entre los jóvenes que realizan la mili. Dichas fuentes aseguran que una de las principales preocupaciones del departamento consiste en reducir al máximo los fallecimientos en el servicio militar, que pasaron de 212 en 1986 a 189 en 1988.El propio ministro de Defensa, Narcís Serra, se mostró recientemente convencido de que el porcentaje de muertes durante el período de servicio en filas no es superior al que se da en la vida civil entre jóvenes de la misma edad, aunque no aportó ningún dato que avalara dicha afirmación. Igualmente subrayó que el índice de fallecimientos es más alto entre los soldados voluntarios que entre los de reclutamiento forzoso y apuntó a la existencia de una relación causal entre el consumo de drogas y los suicidios.

Las muertes de jóvenes en la mili y su creciente reflejo en los medios de comunicación ha sido uno de los factores que más ha contribuido al actual debate sobre el reclutamiento forzoso. Varias fuerzas políticas, entre ellas el Partido Popular (PP), han incluido en sus programas electorales la adopción de medidas destinadas a prevenir y evitar estos fallecimientos.

La ley del Personal Militar Profesional, que entrará en vigor el próximo 1 de enero, prevé el pago de indemnizaciones a los herederos de los jóvenes muertos a consecuencia de la realización del servicio militar desde 1985 hasta ahora. El ministerio ha anunciado también la próxima suscripción de pólizas de seguros para cubrir cuantos accidentes sufran los soldados fuera de su tiempo de servicio.

Por el contrario, Defensa ha descartado la posibilidad de realizar exámenes psicológicos a los reclutas, en contra de lo que recomendó el Defensor del Pueblo para evitar suicidios, pues alega carencia de medios.