Leguina: "Felipe González dio 'luz verde' en julio al posible adelanto de las elecciones autonómicas"

El presidente de la Comunidad, Joaquín Leguina, confesó ayer que el presidente del Gobierno, Felipe González, dio luz verde en julio a la celebración de elecciones autonómicas anticipadas. La ejecutiva nacional del PSOE "definió" esta posible salida -un proyecto de ley que facultase al presidente regional para disolver la Asamblea- como fórmula para sanear la política madrileña, colapsada tras la moción de censura contra Leguina. Los socialistas presentaron esta iniciativa el pasado viernes en la Cámara autonómica. La Mesa de la Asamblea bloqueó ayer el proyecto de ley al oponerse los grupos de centro-derecha a su tramitación urgente.

Leguina afirmó ayer que sus últimas propuestas cuentan con un "importante apoyo" de la dirección de su partido. El presidente regional, en el curso de una visita institucional a varios pueblos de la zona norte, aseguró que mantuvo numerosos contactos personales y telefónicos con Felipe González en los meses de junio y julio. En esas fechas la ejecutiva socialista confiaba, según el presidente de la Comunidad, en obtener el apoyo del Partido Popular para disolver la Asamblea, ya que el CDS parecía más reacio. Sin embargo, esta cuestión no fue abordada entonces en las reuniones que celebraron el número dos del PSOE, Alfonso Guerra, y el vicepresidente del PP José Antonio Segurado.En principio, los socialistas pretendían hacer pública su propuesta para finalizar anticipadamente la legislatura autonómica durante el mes de agosto, pero el proyecto de ley no entró en el registro de la Asamblea hasta la tarde del pasado día 1, horas después de que Felipe González anunciara la convocatoria de elecciones generales anticipadas para el 29 de octubre. Las razones de economía y de freno a la abstención, fueron esgrimidas por Leguina para justificar la conveniencia de que coincidieran ambas convocatorias. Los sondeos manejados por la Federación Socialista Madrileña (FSM) auguraban entonces, según reconoce ahora Leguina, una subida electoral del PSOE e Izquierda Unida respecto a las autonómicas de 1987, frente al estancamiento del PP y la fuerte caída de votos del CDS.

A juicio del presidente de la Comunidad, la actitud del Partido Socialista de Galicia (PSG-PSOE) de oponerse a simultanear las elecciones en esa comunidad autónoma con las generales, ha impedido que prosperara también la coincidencia de éstas con las autonómicas madrileñas. Leguina aseguró que no entendía esta decisión del PSG-PSOE, y que, en su opinión, sólo es comprensible a la vista del frágil equilibrio de fuerzas políticas que sostienen al presidente gallego, Fernando González Laxe.

Tramitación ordinaria

Mientras el presidente Leguina efectuaba estas declaraciones, la Junta de Portavoces de la Asamblea echaba por tierra su propuesta para una disolución urgente del Parlamento regional. Populares, CDS y el portavoz del Grupo Mixto, José Luis Ortiz Estévez, hicieron una vez más frente común. En una reunión previa de la Mesa de la Asamblea, su presidenta, la centrista Rosa Posada, inclinó con su voto la balanza a favor de las tesis de los grupos de centro-derecha.

El proyecto de ley socialista deberá seguir ahora una tramitación ordinaria y pasar al pleno de la Asamblea en el mes de octubre, cuando comienza el período ordinario de sesiones, para una primera toma en consideración.

El portavoz del Grupo Popular, Alberto Ruiz Gallardón, anunció que su partido "no quiere que la ley se promulgue", ya que considera dudosa su constitucionalidad.

Por su parte, el portavoz centrista, Fernando Castedo, declinó avanzar la decisión que adoptará su grupo en el futuro pleno, ya que antes deben estudiar la viabilidad legal de la iniciativa del PSOE. En todo caso, precisó que el CDS estudiará alternativas al proyecto de ley, antes de enmendarlo.

Castedo advirtió que hay un riesgo en la aprobación de esta iniciativa socialista: la apertura de una vía legal para la celebración generalizada de elecciones anticipadas en las 17 comunidades autónomas. Y todo ello, "sólo para justificar la situación creada en Madrid por el apoyo del diputado Nicolás Piñeiro a Leguina para su continuidad en el poder". A su juicio resulta " absurdo" hablar de elecciones en la Comunidad, cuando no se ha aprobado una ley que las permita.

Isabel Vilallonga, portavoz de Izquierda Unida, anunció que pese a haber apoyado el proyecto del PSOE, lo enmen-, dará para que se amplíe hasta cuatro años la duración de la legislatura resultante de unas elecciones anticipadas.