Atentado fallido contra el cuartel de la Guardia Civil de Ondárroa
Dos granadas, que no llegaron a hacer explosión, fueron lanzadas en la noche del viernes contra el cuartel de la Guardia Civil de Ondárroa (Vizcaya) desde una furgoneta robada horas antes por (los personas que se identificaron como miembros de ETA. El atentado produjo escasos daños materiales.Agentes del Equipo de Desactivación de Explosivos de la Guardia Civil (EDEX,) revisaron durante toda la noche el vehículo, ante la posibilidad de que se tratara de un coche-bomba cuya colocación había anunciado un comunicante anónimo en una llamada recibida en el diario Egin.
Minutos después de las 10 de la noche, una granada cayó en el patio del cuartel, que estaba ocupado únicamente por unos 10 guardias, ya que parte de los agentes destinados en Ondárroa se encuentran de vacaciones. Posteriormente, otro artefacto similar, que tampoco hizo explosión, fue hallado en el exterior del cuartel. Los proyectiles fueron lanzados desde dos tubos colocados en la parte superior de una furgoneta Citröen C-15, matrícula de San Sebastián, que había sido robada horas antes en las cercanías de Ondárroa.
El propietario del vehículo y la persona que le acompañaba, J. S. D. y E. U. E. , fueron localizados, alrededor de las once y media de la noche, encadenados a un árbol en un monte cercano por efectivos de la Ertzaintza (policía vasca).
Según informó el Gobierno Civil de Vizcaya, los autores del robo habían citado al dueño de la furgoneta en un bar de Ondárroa, desde donde se dirigieron a la vecina población de Berriatúa para reparar un electrodoméstico.
En el trayecto entre ambas localidades, los desconocidos se identificaron como miembros de ETA y sustrajeron, a punta de pistola, el automóvil.
Poco antes de la medianoche en la redacción del diario Egin se recibió una llamada anónima que anunciaba la colocación de un coche-bomba en las inmediaciones del cuartel de Ondárroa. Efectivos del Equipo de Desactivación de Explosivos de la Guardia Civil inspeccionaron la furgoneta desde donde se lanzaron las granadas y los alrededores del lugar del atentado hasta las 9.30 de ayer, sin encontrar ningún artefacto.
El ministro del Interior, José Luis Corcuera, y el secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, que se encontraban ayer en San Sebastián, acudieron a Ondárroa junto con el gobernador civil de Vizcaya, Daniel Vega, a primeras horas de ayer.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.