Ruptura de las negociaciones sobre la crisis municipal de Cangas

Las negociaciones entre los partidos con representación en el Ayuntamiento de Cangas de Morrazo (Pontevedra) quedaron ayer rotas una hora después de comenzar al negarse el PSOE a aceptar la propuesta de la oposición de disolver la corporación municipal y convocar nuevas elecciones. Los socialistas insistieron en que el actual alcalde, Lois Pena, se mantendrá en su cargo y anunciaron que solicitarán el regreso a la localidad de la fuerza pública "para garantizar la seguridad de las personas".

A la reunión asistieron dirigentes de los cinco partidos representados en la corporación, PSOE, Partido Popular, Frente Popular Galego, Partido Socialista Galego-Esquerda Galega e Izquierda Unida, acompañados de algunos concejales de Cangas, entre los que no se encontraba Lois Pena. La oposición propuso que se solicitase al Gobierno central que disuelva la corporación ante el bloqueo que sufre la vida municipal desde hace tres meses. Los grupos contrarios a Lois Pena también señalaron que como alternativa todos los concejales podrían dimitir de sus cargos para forzar la convocatoria de nuevas elecciones.

Sin embargo, los socialistas rechazaron estas propuestas por entender que no se producen las circunstancias de excepcionalidad que fija la ley para que el Gobierno disuelva una corporación. Según el secretario de organización del PSOE gallego, José Nogueira, el alcalde continuará en su cargo "porque las urnas lo legitiman para ello".

Los representantes de la oposición acusaron a los socialistas de "tener miedo a las elecciones" después del importante retroceso de votos que el partido gobernante sufrió en las pasadas elecciones europeas en el Ayuntamiento de Cangas. Según el portavoz parlamentario del Grupo Popular, Víctor Vázquez Portomeñe, la única intención de los socialistas al abrir las negociaciones era "buscar que nosotros les diésemos un cheque en blanco para garantizar la continuidad de Lois Pena".