64 muertos en el último fin semana del julio más trágico de las carreteras españolas

Las carreteras españolas registraron desde las tres de la tarde del viernes hasta las ocho de la tarde de ayer, domingo, un total de 52 accidentes, en los que perdieron la vida 64 personas, 63 quedaron heridas graves y 24 sufrieron lesiones leves. Esto supone un nivel similar, en cifras absolutas, respecto del último fin de semana de julio de 1988, en el que el domingo coindidió con el día 31. Entonces se registraron 51 accidentes y 66 muertos. No obstante, en esta ocasión aún falta un día -el de hoy- para que concluya la operación retorno, y los datos facilitados por Tráfico no reflejan por completo la jornada de ayer. El presente mes de julio ha sido el más trágico de la historia en las carreteras españolas, con 522 muertos hasta el 25 de julio (datos disponibles oricialmente). En el mismo período de 1988 se registraron sólo 392 muertes.

Asimismo, en los 31 días de julio de 1988 perecieron 517 viajeros. Es decir, en los primeros 25 días del presente julio ya se superó la cifra. total del año pasado. A los ya citados 522 fallecidos hasta el 25 de julio habrá que añadir, al menos, los 64 muertos de este fin de semana -hasta las ocho de la noche de ayer-, lo que hace un total provisional de 586. El mes de julio más trágico hasta ahora -según los datos facilitados ayer por Tráfico- era julio de 1987, en el que perecieron 558 personas. Estas cifras, no obstante, aún son más elevadas en agosto. En el del pasado año, los muertos en carretera sumaron 636 (682 en el año 1987).Durante el día de ayer, se registraron reteaciones y tráfico intenso en las carreteras que conducen a las playas de las costas mediterránea y gallega, según la Dirección General de Tráfico. La misma fuente informó anoche de los embotellamientos registrados, alrededor de las 23.00 horas, en los accesos a las principales poblaciones de todo el litoral, originados por la circulación de retorno de quienes se desplazaron a las playas para disfrutar del fin de semana o del día festivo. A esa hora se registraban aún retenciones de un kilómetro en la Nacional VI a su paso por Tordesillas (Valladolid).

En la provincia de Burgos se produjo circulación intensa en la nacional I en dirección a Madrid, entre la salida del peaje de Castañares y el nudo Landa, y en la nacional 620, sentido Portugal. La Guardia Civil desvió el tráfico por la Nacional I hasta Lerma -donde los vehículos de emigrantes contribuyeron a colapsar ese tramo- y desde allí por la c-110 hasta Quintana del Puente (Palencia).

La fluidez fue la tónica en las carreteras catalanas, aunque a media mañana de ayer se produjeron retenciones de seis kilómetros en la comarcal 250, en Gerona. Anoche había retenciones en la entráda de Barcelona, en la C-246, que conduce a la costa del Garraf. Según la Jefatura Provincial de Tráfico de Valencia, durante todo el día la circulación fue fluida en las principales carreteras turísticas de la provincia, incluso en aquellas que enlazan la capital con las playas más próximas y que los domingos suelen sufrir retenciones considerables. La entrada a Valencia por la autopista A-7 -en el punto conocido como semáforo de Europa- estuvo todo el día transitable.

Por otra parte, alrededor de 300 personas cortaron ayer la circulación en la C-321 a su paso por Vélez Blanco (Almería), informa Ángel González. La Guardia Civil desvió el tráfico por caminos alternativos y no se produjo ningún incidente.

En Algeciras (Cádiz), la segunda fase de la operación paso del Estrecho, dispositivo coordinado por Protección Civil para canalizar el tránsito de viajeros magrebíes por el puerto de esa localidad ha discurrido con normalidad durante el fin de semana. Fuentes de Protección Civil estiman que aún quedan por llegar hasta Algeciras unas 200.000 personas en los próximos días, en una media diaria de 20.000 pasajeros y 4.000 vehículos. Al mediodía de ayer sólo unos 500 coches permanecieron en el recinto portuario algecireflo a la espera de embarcar hacia Ceuta y Tánger.

Aeropuertos

En Madrid-Barajas, el retraso medio estimado fue de 60 minutos en los vuelos afectados por la huelga de controladores franceses. Los vuelos procedentes de o con destino a Centroeuropa sufrieron retrasos de hasta dos horas.

En el aeropuerto de El Prat, en Barcelona, se retrasaron casi todos los vuelos internacionales. Los vuelos con destino a Roma y Atenas fueron los más perjudicados y partieron cinco y tres horas después del horario previsto. Los demás vuelos internacionales tuvieron retrasos que oscilaron entre 30 y 90 minutos. Los más afectados fueron los turistas que se desplazaron en vuelos charter.

El aeropuerto de Son Sant Joan, en Palma de Mallorca, registró ayer retrasos medios superiores a dos horas en sus vuelos charter internacionales a causa de la huega, informa Joan Caimari.