Los médicos extirpan a Marcos el riñón trasplantado

AGENCIAS, En un penúltimo esfuerzo por prolongar la vida del ex dictador filipino Ferdinand Marcos, los médicos que la atienden en el hospital St. Francis le extirparon el pasado jueves el riñón que se la había trasplantado hace cinco años, por considerarlo la causa de la grave infección que padece el enfermo, que sigue en estado semicomatoso.

Una fuente hospitalaria comentó que un equipo de cinco doctores extirpó el riñón no para corregir anomalías, sino para evitar la causa de la infección. La misma fuente añadió que se esperaba un leve mejoría de Marcos después de la intervención. De no producirse una inmediata recuperación, los doctores auguran que el enfermo no sobrevivirá a este fin de semana.

Además de la vida, Marcos se está dejando en el hospital de la capital de Hawai parte de su inmensa fortuna, según los amigos del ex dictador. El internamiento médico y los ciudados cuestan entre 1.500 y 2.000 dólares diarios (alrededor de 260.000 pesetas). El estado físico de Marcos se deterioró después que su hígado dejase de funcionar el pasado miércoles. El hijo de Marcos informó que la operación de riñón duró hora y mediam en el transcurso de la cuál, su madre, Imelda, su hermana Irene y él mismo estuvieron rezando en la capilla del hospital. "Era lo único que podíamos hacer", comentó Imelda, "ahora esperamos un milagro".

El doctor Eugene Tiwanak, portavoz del hospital St. Francis, informó que se mantiene la vida artificialmente a Marcos porque la mayoría de sus órganos vitales no responden. Tiwanak añadió que las posibilidades de recuperación del paciente son escasas. Los amigos de la familia Marcos afirman que antes de su entrada al quirófano, Imelda le susurró a su esposo una conocida canción filipina, Cuánto te quiero. Según ellos, el ex dictador abrió un momento los ojos y apretó las manos de su mujer.

Hasta el momento, la presidenta filipina, Corazón Aquino, ha rechazado las peticiones de la familia Marcos para regresar al archipiélago.