El Tercer Mundo critica los planes de Mayor Zaragoza en la Unesco

Los países del Tercer Mundo han expresado sus primeras discrepancias serias con la política desarrollada por Federico Mayor Zaragoza al frente de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) desde que fue elegido director general, hace año y medio.La 131ª sesión del Consejo Ejecutivo, que se clausuró ayer en París, tras un mes de reuniones de sus 51 integrantes, se cerró finalmente con la aprobación de un documento por consenso sobre el plan a medio plazo para seis años, la columna vertebral del mandato de Mayor, que debe ser aprobado en la Conferencia General en su reunión de octubre y noviembre próximos. Sin embargo, el consenso se ha alcanzado a fuerza de introducir numerosas enmiendas de los países subdesarrollados, que reprochan al director general una orientación escorada hacia los países del Norte desarrollado y le critican por haberse rodeado de un equipo surgido mayoritariamente de Europa o de EE UU.

Con los florilegios propios del lenguaje diplomático, el documento aprobado por el Consejo Ejecutivo encierra críticas al proyecto presentado por Mayor, especialmente a su introducción, en la que observa un análisis particular del director general sobre la situación mundial. El documento enfatiza sobre la persistencia de "las desigualdades, los desequilibrios y las injusticias", y sobre el "agravamiento de la situación en los países en desarrollo", en parte debido al "peso de la deuda" externa. Todas estas circunstancias deberán reflejarse en el plan definitivo.

La sesión se ha caracterizado por la resurrección del Grupo de los 77, que agrupa a los países subdesarrollados de África, Oriente Próximo, Asia y América Latina. El grupo hizo circular un documento que enmendaba 121 párrafos del plan de Mayor e introducía más de 300 enmiendas. Su influencia en el documento final se nota en una reivindicación del "nuevo orden mundial de la información y de la comunicación", uno de los temas que provocó la retirada de EE UU y del Reino Unido y, en definitiva, el relevo del anterior director general, Amadu Mathar M'Bow.