"Trabajar en casa"

Andrew Pearson, ejecutivo de ventas de una empresa de servicios financieros de Nueva York, fue un día a decir a su jefe que su hija pequeña necesitaba un jardín donde jugar. Pero no le estaba pidiendo un aumento de sueldo, sino la posibilidad de realizar su trabajo en casa en vez de en la oficina. Pearson dice que trabaja más y tiene más tiempo libre desde que abandonó la oficina. Casi 14 millones de trabajadores están en situación parecida a la de Pearson.La tecnología ha posibilitado a muchas personas trabajar en su propia casa: los ordenadores, el facsímil, las fotocopiadoras y otras herramientas de tecnología punta son ahora relativamente baratas y una oficina en casa se puede montar sin un gasto excesivo. Las empresas comienzan a reaccionar ante el fenómeno. Las pequeñas no suelen tener inconvenientes en que los trabajos se hagan en casa y las grandes ven el ahorro de espacio en sus oficinas como algo a considerar.

Los expertos creen que trabajar en casa tiene también puntos en contra. El trabajador puede comenzar a sentirse solo y, por otra parte, vivir en la oficina puede significar también que nunca se dispone de momentos de recreo. Los mismos aparatos tecnológicos que permiten trabajar en casa, convierten el hogar en lugar de constantes interrupciones y alejan por completo la idea de un lugar plácido. Así se explica que ya existan en EE UU trabajadores que tras un tiempo en sus casas, vuelvan a sus oficinas.

6 de mayo