Madrid sufrió ayer un colapso de tráfico histórico

JORGE A. RODRÍGUEZ, El atasco de ayer en Madrid fue uno de los mayores que se recuerdan. Las principales arterias de la ciudad estuvieron al 100% de su capacidad durante toda la tarde, es decir, prácticamente paradas. El incremento de hasta un 8% y un 12% en la intensidad del tráfico, sostenido durante ocho horas, Ilevó a manifestar a un portavoz del Gabinete Municipal de Información al Tráfico que en Madrid "no cabía un coche más". La M-30 fue una auténtica trampa. La situación comenzó a normalizarse hacia las once de la noche, salvo en las carreteras de Valencia y Andalucía.

Los atascos comenzaron hacia las dos de la tarde y se prolongaron hasta pasadas las once de la noche, especialmente en las principales vías de distribución de vehículos y en las carreteras de salida de la ciudad. En el centro de Madrid, los embotellamientos fueron muy intensos en la M-30, Gran Vía, Alcalá, Rondas, Bulevares, Santa María de la Cabeza, Alfonso XII, Recoletos, Cuzco y Lima. Para realizar un desplazamiento por la ciudad en el que habitualmente se tardan 20 minutos algunos conductores invirtieron unas dos horas. La Castellana y algunas de sus transversales estuvieron repletas de vehículos en todas las direcciones. Mientras la gravedad del colapso aumentaba por minutos, el concejal de Circulación del Ayuntamiento de Madrid, el socialista Eugenio Morales, no pudo ser localizado, ya que mantenía una reunión con los concejales de su grupo municipal.Posibles causas

Expertos en tráfico achacaron esta saturación a la mayor afluencia de vehículos que suele producirse tras una jornada de huelgas y manifestaciones, a los desplazamientos originados por las personas que realizaban preparativos para el viaje del puente del 1 y 2 de mayo y a la imposibilidad de las carreteras de salida para absorver los miles de vehículos que llegaban a ellas.

La vía que padeció con especial intensidad los atascos fue la M-30, que se convirtió en una auténtica trampa para los automovilistas. No sólo no se podía circular por ella sino que era imposible salir. La situación se complicó en esta autovía de circunvalación a partir de las 14.15 horas, cuando grupos de jóvenes cortaron la citada vía entre los puentes de Toledo y Praga. Las retenciones llegaron hasta Marqués de Monistrol.

En el sentido inverso de la autovía, las colas de coches llegaron desde el puente de Pio XII hasta la salida hacia Andalucía, debido a que esta carretera, que fue la que registró una mayor afluencia de vehículos, no tragaba, según fuentes del Gabinete de Información al Tráfico. De hecho, este punto es un embudo, ya que los seis carriles de la M-30 se convierten en tres.

En cuanto a las vías de salida, los peores atascos se produjeron en las carreteras Andalucía, Barcelona y Extremadura, seguidas de las de Valencia y La Coruña. En esta última, se produjo un accidente que agravó aún más el colapso. La vía alternativa recomendada para evitar esta autovía, la carretera de Colmenar, también sufrió importantes atascos debido a que se estaban realizando obras de asfaltado.En la de Burgos el tráfico fue también muy denso debido a que un grupo de camioneros cortó esta nacional, a la altura de la Cabrera, en protesta por las restricciones para la circulación de vehículos pesados y mercancías peligrosas.

El caos comenzó a remitir a partir de las 23 horas, medida que las carreteras de salida iban distribuyendo los vehículos hacia sus distintos puntos de destino. Las últimas zonas en descongestionarse, al filo de la medianoche de ayer, fueron la M-30 y el barrio de Salamanca.