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Supuestas amenazas de los GAL a los 'etarras' deportados en la República Dominicana

ENVIADO ESPECIALUn joven, que no se identificó, amenazó ayer en nombre de los GAL a los seis etarras deportados en Santo Domingo. Un cartel colocado junto a los apartamentos donde residen los miembros de ETA fue retirado por los vigilantes de seguridad. Mientras tanto, los seis activistas llevan una vida de anacoretas. No salen del apartamento, mantienen horarios fijos, comen verdura frecuentemente, juegan al tute y no beben nada de alcohol, según han asegurado vigilantes con acceso a la casa.

"ETA, asesinos. Ya os ajustaremos las cuentas. Aquí los GAL", decía el cartel colocado por el joven junto al edificio de apartamentos de la zona residencial de Naco, una de las numerosas de Santo Domingo.

En la parte posterior del cartel figuraban escritos los nombres de siete etarras, los seis deportados desde Argelia y Miguel Ángel Aldana, quien al parecer ha regresado de Panamá y vive en otra zona de la República Dominicana. A la izquierda de cada uno de sus nombres estaba dibujada una cruz con tinta roja.

Este nuevo incidente ha vuelto a exasperar a los vecinos del edificio, quienes han exigido que los etarras sean trasladados inmediatamente. Los vecinos temen una bomba de los GAL o cualquier represalia de esta banda terrorista. La mayoría de ellos, profesionales y hombres de negocios de la clase alta dominicana, van siempre armados para enfrentarse a cualquier situación.

Mientras tanto los miembros de ETA, encabezados por Eugenio Etxebeste, mantienen firmes horarios y estrictas medidas para evitar la monotonía y el desfallecimiento. Un vigilante con acceso al apartamento ha relatado a algunos periodistas españoles los pormenores de su estancia en los cerca de 100 metros cuadrados de vivienda.

Se levantan diariamente alrededor de las seis de la mañana. Duermen en tres habitaciones, cada una con dos camas y algunas tipo litera. El calor no es problema pues disponen de aire acondicionado. Etxebeste duerme siempre "con su esposa", que no es otra que Belén González Peñalba, una de las más veteranas activistas de ETA.

Preparan el desayuno con jugos de fruta y leche. Los seis van uniformados, con pantalón corto y camiseta. Leen diariamente los periódicos, generalmente El listín diario y Caribe Hoy.

Los etarras juegan al tute, oyen las noticias de la emisora Radio 1.000 Informando y los telediarios dominicanos. Siempre cocina Etxebeste y Belén sirve la comida y friega los platos. Toman mucha verdura y huevos y no comen arroz ni carne ni pescado.

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